El Consejo de Ministros para la Sustentabilidad y el Cambio Climático (CMSyCC), instancia que preside la ministra del Medio Ambiente (MMA), Maisa Rojas, aprobó el viernes el “Proyecto de ley que promueve la valorización de los residuos orgánicos y fortalece la gestión de los residuos a nivel territorial”. Con esta votación se habilita la presentación del proyecto al Congreso, lo que debiera ocurrir durante este mes.

La iniciativa de ley busca agilizar una agenda en la que el MMA viene trabajando desde 2016 y que incluye la Estrategia Nacional de Residuos Orgánicos (ENRO, no vinculante), aprobada en septiembre de 2021 y que tiene como meta alcanzar a 2040 un 66% de valorización de los residuos orgánicos generados a nivel domiciliario, de los cuales actualmente se valoriza menos del 1%. En la ENRO se indica que el 58% de los residuos sólidos municipales, en peso, corresponde a residuos orgánicos – y promueve la valorización mediante compostaje y recuperación energética, principalmente.

En la reunión del Consejo, el proyecto fue presentado por Tomas Saieg, jefe de la Oficina de Economía Circular del MMA quien entregó un diagnóstico que dio cuenta de la urgencia de aprovechar el potencial de estos residuos -restos de frutas, verduras y podas, entre otros- y evitar que sean enviados a disposición final, es decir, rellenos sanitarios y vertederos.

Por una parte, señaló Saieg, la infraestructura de disposición final a nivel país está en crisis, con casos extremos: “Es una situación preocupante. Hoy existen muchos vertederos y basurales que siguen operando aunque debieron haber cerrado pero no lo han hecho porque no hay alternativa; y tenemos rellenos sanitarios que están terminando su vida útil o ya terminó pero siguen operando por falta de alternativa”.

Por otra parte, explicó el especialista, producto de su descomposición anaeróbica los residuos orgánicos (RO) que se depositan en los rellenos sanitarios van generando importantes emisiones de gas metano, un gas de efecto invernadero (GEI) causante del calentamiento global. Dicho gas se puede recuperar para producir energía y/o combustible, pero se requiere infraestructura y tecnología especial, que en Chile aún no se masifica. Su reducción contribuirá a mitigar el cambio climático y está en línea con los compromisos adquiridos por Chile en el marco del Acuerdo de París, comentó Saieg.

“Es un problema que no es solo ambiental, el socio ambiental, tenemos muchas crisis de residuos, tenemos una en Chiloé -Ancud está llevando sus residuos a Los Ángeles, a 650 km, y paga más de un millón de pesos por camión por viaje-, (…) Esto se cruza con un problema general de desfinanciamiento del servicio de aseo  municipal. Los municipios del país gastan en suma alrededor de 500 millones de dólares al año en gestión de residuos, mientras que lo que se recauda por la tarifa de aseo es apenas 160 millones de dólares, y el resto se cubre con el fondo común municipal, o con otros recursos que debieran estar siendo destinados a otras necesidades de los municipios”, subrayó el jefe de la Oficina de Economía Circular del MMA.

En resumen, dijo Saieg, “si atendemos este problema (de los RO) de buena manera vamos a estar solucionando problemas sociales, ambientales y presupuestarios”, como parte de una solución más amplia, que incluye la Ley REP, en especial envases y embalajes que comienza a regir en septiembre.

A modo de síntesis, el proyecto de ley busca un manejo diferenciado de residuos orgánicos municipales a distintas escalas: domiciliaria, comunitaria e industrial. Esta última permitirá abordar parte importante del problema, mediante la recolección puerta a puerta de RO para ser llevados a plantas de tratamiento. La proyección para 2036 es una reducción del 50% de lo que llega a los rellenos sanitarios.

Para lo anterior, la iniciativa contempla tres grandes grupos de instrumentos: de regulación directa; económicos para el financiamiento del proyecto; y de planificación y gobernanza.

En cuanto a la gradualidad, en un periodo de 14 años se irían sumando todos los municipios, que han sido separados en tres grupos, para partir por los que presentan algún tipo de urgencia y/o están más avanzados en este tipo de gestión. Asimismo, se establecieron cinco fases para cada municipio, para ir avanzando en la incorporación de los residuos domiciliarios así como de otros generadores, como centros comerciales, ferias libres, restoranes, estadios, etc.

Situación crítica

Este proyecto de ley ha sido trabajado con otras reparticiones, entre ellas la Subsecretaría de Desarrollo Regional y Administrativo (Subdere), razón por la cual el subsecretario Nicolás Cataldo participó el viernes del Consejo de Ministros para la Sustentabilidad. “La situación de los residuos sólidos domiciliarios nos tiene bastante preocupados, tenemos instalada un a coordinación interministerial con Medio Ambiente y Salud, con los cuales hemos estado atendiendo algunas de las situaciones más críticas a nivel nacional (…). Esas crisis muestran de la necesidad de enfrentar en serio, con una estrategia legislativa, con herramientas legislativas, administrativas y financieras para poder abordar la crisis de la basura de manera integral”, indicó Cataldo.

El Subsecretario además habló de la ineficiencia en el uso de los recursos que ha provocado la emergencia y apuntó al hecho de que las personas no quieren tener cerca un centro de gestión de residuos de ningún formato, lo que, dijo, dificulta aún más el proceso de inversiones. “Enfrentar esto es una tarea urgente a nivel de política de Estado y este proyecto apunta en la dirección correcta, como uno de los elementos que va a ayudar”, resumió Cataldo.

Los ministros presentes en el Consejo, junto con aprobar el proyecto, destacaron la necesidad de avanzar en el mismo, junto con plantear posibilidades de mejora durante la tramitación legislativa.

Antes de proceder a la votación, la ministra Maisa Rojas señaló que “en el país y el mundo hablamos de la triple crisis: cambio climático, pérdida de biodiversidad y contaminación; con este proyecto de ley nos hacemos cargo de esa tercera crisis, que tiene que ver con los residuos y con la contaminación”. Añadió que la crisis de la contaminación es la más fácil de entender y, “por lo tanto, tiene el enorme potencial de generar un cambio cultural a través de la educación, que creo que es un enorme co-beneficio de este proyecto de ley”.

Hace pocos días, en el marco de la Semana del Clima, el subsecretario del Medio Ambiente, Maximiliano Proaño, señaló que esperan ingresar al Legislativo durante este mes de mayo el proyecto de Ley de residuos orgánicos, que inicialmente pensaban presentar a fines del año pasado. “Creemos que es un proyecto en el que tenemos que avanzar como país y hacerlo rápido”, comentó en la oportunidad, aludiendo a los beneficios ambientales y financieros de la iniciativa.

Con la aprobación en el Consejo de Ministros para la Sustentabilidad y el Cambio Climático, el proyecto está en condiciones de ser ingresado al Congreso para su tramitación. Dicha instancia, liderada por el Ministerio del Medio Ambiente, cuenta con la participación de los ministerios de Hacienda, Economía, Energía, Educación, Transportes, Obras Públicas, Salud, Agricultura, Vivienda, Desarrollo Social, Minería, y Ciencia.