Pese a que la plataforma Gente Dulce comenzó a gestarse hace cerca de un año, “la pandemia aceleró el desarrollo de la plataforma de forma bastante brusca y ha sido un salvavidas para muchos emprendedores de la Región del Biobío”, dice Marcelo Díaz, director del Centro de Emprendimiento Colbún (CEC) y gestor de Gente Dulce.

En efecto, Gente Dulce es una vitrina e-commerce, que forma una parte de la estrategia del CEC, que promueve el trabajo de pequeños productores de las cinco comunas del Biobío donde opera Colbún: Santa Bárbara, Quilleco, Quilaco, Antuco y Coronel. Se trata de pymes que normalmente no cuentan con los canales online apropiados para ofrecer sus productos, y que ahora con las restricciones sanitarias han tenido que reinventarse y acercarse hacia otros modos de venta.

“Nosotros nos definimos como una plataforma e-commerce de precio justo y sustentable, ya que al productor se le paga realmente lo que vale el producto, de ahí para arriba. Es la primera plataforma que es gratis para el emprendedor, no se le cobra. Además tiene una subvención de una empresa para ayudarle a comercializar el producto. Los asesoramos a formalizarse para que puedan vender online y tener facturación. Los ayudamos a desarrollar su marca, un producto de alto valor, hacemos campañas creativas y cuando el cliente recibe el producto, le hacemos la transferencia al emprendedor”, añade Marcelo Díaz.

Dentro del catálogo se cuentan 15 pequeños productores de la región que ofrecen una variedad de 40 productos que son distribuidos a todo Chile. Los clientes van desde Antofagasta hasta Punta Arenas. Entre las empresas elegidas, figuran aquellas que apuestan por la producción limpia, la sustentabilidad y el trabajo con las comunidades. “Sucedía que ellos vendían sus productos solo en ferias artesanales y era importante visibilizarlos en todo Chile”, dice Díaz.

El enfoque sustentable

Entre los productos seleccionados para www.gentedulce.cl se cuenta Cerveza Huequecura, que para su proceso de fabricación rescata el agua de alta pureza del río homónimo, afluente del río Biobío, y mide su huella de carbono; Brotes Nativos, que vende productos naturales a partir de hierbas que se cultivan bajo un proceso agroecológico; y las mieles Rayen Mawida, cuyo proceso no utiliza ningún tipo de químicos. También figuran marcas de embutidos, chocolates, salsas, extractos florales y artesanías.

Ese sello inspirado en el respeto al medioambiente también lo representa Artesanía Nativa Santa Bárbara, que se preocupa de la restauración y fabricación de muebles rústicos como tablas para asados. La gracia es que el creador de ese emprendimiento, Christian Romero, ocupa madera reciclada que rescata de las aguas del río Biobío.

“Partí con este emprendimiento hace casi dos años en Santa Bárbara. Nací aquí, me crié en Santiago y volví hace cuatro años. Una vez estaba cerca del río y vi unos troncos debajo del agua y unos pedazos de madera botados. Me empecé a imaginar qué se podía hacer, formé unas figuras y luego fui a unas barracas a comprar pedazos que no servían. Y se me ocurrió hacer tablas para el quincho de pura madera reciclada. Yo ocupo las vetas de la madera para trabajar, no la intervengo”, explica el fundador de la empresa.

Romero valora el respaldo de Gente Dulce para con su emprendimiento, porque “se ha convertido en una vitrina para los emprendedores de la región del Biobío. Es una red muy importante para difundir mi trabajo con imágenes y es un excelente canal de venta. Para el 18 de septiembre pasado me fue muy bien”.

Según Julián Perret, director regional de Asuntos Públicos de Colbún, Gente Dulce brinda la “posibilidad real de que los emprendedores aprovechen este medio propio. Nosotros queríamos hacer algo a la escala de ellos. Ni Mercado Libre ni Yapo.cl hubiesen generado algo así a nivel de competencia. Además, cada emprendimiento rescata la identidad propia regional. Eso es algo que es muy importante desde el punto de vista cultural y patrimonial”.

El otro apoyo importante, agrega Perret, es la asesoría que ofrece Gente Dulce (a través del CEC) a los pequeños productores para mejorar sus procesos logísticos: “Formalizar la venta online no todos lo tienen, debe haber una disposición a esta venta, estás obligado a hacer un packaging de buena calidad, hay que llevarlo al servicio logístico que transportará el producto y verificar los tiempos de entrega para que sea totalmente responsable. Es valioso apuntar hacia la digitalización en este escenario de pandemia en que los negocios están desafiados a cambiar”.

Pero más allá de Gente Dulce, en Colbún valoran en general el apoyo del Centro de Emprendimiento Colbún a más de 300 emprendimientos. Cuenta con unos fondos de preincubación e incubación para ayudar a surgir a empresas y fortalecer su desarrollo cuando están creadas, respectivamente. “Ayudamos a las pymes en su etapa inicial y en su fase de crecimiento”, ratifica Marcelo Díaz, director del CEC.

“El Centro tiene muchos años y se encarga principalmente de mejorar la calidad de vida de los vecinos de las comunas en que estamos ubicados. Gente Dulce surgió como una alternativa adicional a eso y ha cumplido la misma función de ser una vitrina para muchos emprendimientos sustentables”, remata Díaz.