El cambio climático es uno de los problemas ambientales más urgentes de nuestra sociedad que requiere una pronta solución. Los científicos continúan advirtiéndonos de sus impactos y la necesidad de transformar la economía global a través de las energías limpias o el reciclaje, entre otras alternativas.

Lo anterior, ha generado una gran y urgente demanda por “habilidades y trabajos verdes” como por ejemplo, consultores en energía solar, sostenibilidad, financiamiento verde, oficiales de cumplimiento, etc., que lideren la búsqueda de talentos en estas áreas en el mundo y que se requieren para enfrentar este flagelo.

Afortunadamente, los mercados laborales dan cuenta de ello y nos están entregando buenas noticias. Por ejemplo, una de ellas dice relación con una reciente investigación desarrollada por Linkedin que reveló que siete de ocho trabajadores adolecen de habilidades “verdes” y que el crecimiento de la demanda por talento “verde” supera a la oferta. Del mismo modo, el estudio plantea que desde marzo de 2020 los trabajadores con habilidades verdes son contratados a una tasa mayor que aquellos con habilidades tradicionales, mientras que los sectores de energía y finanzas requieren más conocimientos en estas materias.

En esta misma línea y de forma paralela, los economistas nos recuerdan permanentemente las enormes oportunidades que existen en la descarbonización de nuestra economía, en la protección de la naturaleza y en el reciclaje de materiales. Para graficar lo anterior, basta señalar que la Agencia Internacional de Energía, en un reciente informe, recomendó la necesidad de inversiones anuales en energías limpias por USD 2,8 trillones de USD en países en desarrollo a principios de 2030 si queremos evitar las peores consecuencias del cambio climático.

Cabe consignar que durante 2022 las inversiones en países en desarrollo en energías limpias sumaron USD 770 billones. En definitiva, hoy requerimos soluciones creativas, a costos eficientes y rentables que movilicen el capital necesario para lograr este tan necesario cambio. Ya no basta con las buenas intenciones sino que debemos ser capaces de crear soluciones a gran escala que nos permitan avanzar con la velocidad necesaria requerida