Almacenamiento a gran escala, nuestra apuesta por el almacenamiento de energías renovables
Nuestros desafíos y aspiraciones buscan responder al futuro, con una infraestructura resiliente, que contribuya a enfrentar el cambio climático y aportar al desarrollo sostenible de Chile, desde nuestra experiencia y capacidades, entendiendo que el fortalecimiento de la industria y del Sistema Eléctrico Nacional es una medida prioritaria y urgente para entregar la energía que transforma a nuestras sociedades y futuras generaciones.
Recientemente, el Presidente Gabriel Boric anunció la licitación para sistemas de almacenamiento de energía eléctrica renovable por US$ 2.000 millones de dólares, señalando que será el proyecto más grande de América Latina, que se extenderá por el desierto de Atacama.
ISA Interchile que ya cuenta con operaciones en transmisión de energía en la región, observa el almacenamiento como una solución de red y considera que el segmento está en el mejor de los momentos y en particular Chile, en el mejor de los pronósticos.
En este sentido, este tipo de anuncios sobre el futuro energético de Chile son muy positivos y conectan con sus ventajas comparativas en materia de energía, lo que a su vez puede facilitar la creación de procesos de encadenamiento productivo, alrededor de la expansión de este rubro y avanzar más rápido en el objetivo trazado como país, que es alcanzar la carbono neutralidad al año 2050.
En esa línea, como empresa hemos dado importantes pasos apostando al 2030, triplicar nuestros activos con una inversión desde 2018 a 2030 de US$ 2.800 millones, de los cuales hemos destinado casi US$ 1.000 millones entre el proyecto Kimal-Lagunas y la megalínea Kimal-Lo Aguirre. De los US$ 1.800 millones restantes, como mínimo planeamos invertir US$ 400 millones en oportunidades que vayan mucho más allá de la transmisión tradicional, como soluciones asociadas a las redes que podrían, por ejemplo, ir de la mano de almacenamiento u otras tecnologías.
Estas son algunas de nuestras apuestas para generar un aumento en la eficiencia de las instalaciones de transmisión, así como también, contribuir con alternativas asociadas a las redes, para desarrollar las nuevas industrias que se han ido posicionado de cara al futuro, tal como el hidrógeno verde, energía que promete jugar un papel importante en la transición energética.
Nuestros desafíos y aspiraciones buscan responder al futuro, con una infraestructura resiliente, que contribuya a enfrentar el cambio climático y aportar al desarrollo sostenible de Chile, desde nuestra experiencia y capacidades, entendiendo que el fortalecimiento de la industria y del Sistema Eléctrico Nacional es una medida prioritaria y urgente para entregar la energía que transforma a nuestras sociedades y futuras generaciones.