A casi dos meses de asumir como director ejecutivo de la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático, Giovanni Calderón, abogado y ex diputado por la Región de Atacama, empieza a instalar los principales ejes de su gestión y a reorientar el funcionamiento interno de este organismo dependiente de Corfo.
Creada originalmente como Consejo de Producción Limpia, hoy la agencia enfrenta el desafío de abarcar una problemática mucho más amplia cruzada por los impactos del cambio climático. “Hemos ido desarrollando la convicción de que las políticas debieran orientarse hacia la adaptación, porque Chile es un bajo emisor de gases de efecto invernadero, y aunque mitigue y cumpla sus compromisos de mitigación -que es nuestro deber como agencia-, lo más relevante para los chilenos son los efectos del cambio climático”, dice Calderón.
Para hacer frente a estos escenarios, agrega, se redefinirán los instrumentos a través de los cuales actúa la agencia. “En esos instrumentos vamos a introducir líneas de acción en materia de cambio climático. De mitigación, por cierto, los Acuerdos de Producción Limpia (APL) tienen medición de impacto de mitigación, y de cuánta energía o agua se ahorró. Vamos a introducir indicadores de impacto en los otros instrumentos, acuerdos de preinversión y acuerdos de gestión de cuencas, y les vamos a agregar acciones de mitigación y adaptación en cambio climático”.
¿Cómo se hará esto?
Primero, es necesario levantar un diagnóstico de cuáles van a ser las necesidades de Chile en materia de adaptación al cambio climático, porque los efectos no son los mismos en todos los países. Por ejemplo, no está científicamente claro si la temperatura del mar en nuestras costas va a aumentar o a disminuir. Ambos efectos tienen consecuencias distintas. Está más o menos claro que el aumento del nivel del mar no afecta a Chile continental, pero si afecta a Chile insular, y tenemos 770 mil km2 de costa insular, donde hay poblaciones y actividad productiva que se va a ver complicada. Entonces, lo primero que tenemos que hacer es aterrizar ese diagnóstico lo más rápido posible para empezar a generar acciones de adaptación.
¿Cómo se van a definir los indicadores de impacto?
La idea es introducir líneas de sustentabilidad y cambio climático en los otros instrumentos. Por ejemplo, uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU es trabajo de mejor calidad. Ese elemento tiene que ver con la posibilidad de que un proyecto de inversión pueda sostenerse en el tiempo, y la gran demanda de sustentabilidad en regiones -en ese ámbito- es la empleabilidad local. Entonces el desafío es, a través de los acuerdos de preinversión, que son una participación temprana, introducir indicadores de impacto en empleabilidad local, como el uso de proveedores locales, entre otros.