Este proyecto de reconversión urbana busca transformar las actuales instalaciones de mantenimiento y operaciones enclavadas en el centro de Antofagasta, para desarrollar un nuevo barrio, pensando en la sustentabilidad futura de la ciudad. Son 48 hectáreas ubicadas en zonas tradicionales de la ciudad y que conectan con algunas de sus principales avenidas y están cercanas a servicios, centros comerciales y establecimientos educacionales.

Sin duda, este plan es una gran oportunidad para el futuro de FCAB, dado que implica mover y levantar nuevas instalaciones que permitan mantener su liderazgo y así continuar ofreciendo servicios de transporte y logística de carga a la minería, como por ejemplo ácido sulfúrico, cátodos de cobre y concentrados de minerales.

El Plan de Reconversión de Patios Ferroviarios contempla tres proyectos: Habilitación de Suelos, Traslado Progresivo de las Operaciones y Desarrollo Urbano. Para llegar a todo esto, además de una completa asesoría técnica y económica, sumó la participación ciudadana, donde más de 400 vecinos que residen en las zonas aledañas asistieron a encuentros de carácter informativo.

Actualmente, se está a la espera de obtener los permisos ambientales para la ejecución del primer proyecto de Habilitación de Suelos. En estos momentos, la evaluación está en la fase de preparación del Adenda 2 para responder el segundo Icsara (Informe Consolidado de Aclaraciones, Rectificaciones o Ampliaciones). Con esto, se espera la aprobación del EIA durante el transcurso del año 2021, tomando en cuenta que estos procesos demoran entre 18 y 24 meses en total.

Desafío

El gerente de Sustentabilidad y Desarrollo Territorial de FCAB, Jaime Henríquez, explica que “este plan es a largo plazo y, por eso, trabajaremos tanto la Habilitación de los Suelos como el Traslado de las Operaciones y el Desarrollo Urbano de manera progresiva y por etapas”.

Respecto al desarrollo urbano, el ejecutivo de FCAB señala que para su avance es fundamental el éxito de las etapas preliminares, aunque “la idea es avanzar a través del desarrollo de unidades urbanas, las cuales se irán ejecutando una vez finalizada la habilitación de suelos de cada sector y a partir de la necesidad de consolidación de los nuevos barrios”.

Todo será con una mirada de desarrollo integral, que va más allá de la continuidad operacional de FCAB, porque es un proceso participativo y con la comunidad, donde “queremos ser un actor protagonista en el proceso de transformación urbana integral de Antofagasta, a través de la transparencia y flexibilidad en la implementación de los procesos, el relacionamiento con las comunidades y propuestas de valor para buscar soluciones en ámbitos de la vida en comunidad y habitabilidad”.

“Todas las etapas del Plan de Reconversión de Patios Ferroviarios se han ido construyendo de manera participativa y seguirá siendo así, en torno al futuro Desarrollo Urbano, donde continuaremos involucrando a los vecinos, autoridades, líderes de opinión y también a nuestros propios trabajadores”, resume Henríquez.

Crecimiento

Otro factor clave es el crecimiento con una mirada de negocio y ciudad, porque el Plan de Reconversión de Patios Ferroviarios contempla optimizar la operación de la compañía de acuerdo con los actuales desafíos del transporte y el desarrollo de la región de Antofagasta, donde FCAB ha estado presente a lo largo de 131 años.

Esto significa historia, presencia y tradición, por lo que uno de los compromisos es rescatar la identidad cultural antofagastina, el patrimonio ferroviario y el aporte de FCAB a la ciudad.

De hecho, desde hace dos años se trabaja en la habilitación de la Estación Valdivia, ícono de Antofagasta, ya que en el proceso de participación ciudadana, los vecinos manifestaron su interés de que este lugar se convierta en un espacio abierto a la comunidad.

El Grupo AMSA, a través de FCAB, acogió esta inquietud y encargó estudios para saber en qué condiciones se encontraba el inmueble, tarea que recayó en consultores especializados, los que revisaron los aspectos técnicos y levantaron un diagnóstico certero de la estructura. Este análisis arrojó que la estación estaba en condiciones de ser habilitada, por lo que ya se trabajó en una imagen objetivo y hoy se está avanzando en generar un modelo de gestión, el cual contemplará la participación de los vecinos, actores locales y también autoridades.