¿Una buena o mala crisis?
“Si queremos vivir una buena crisis, estos tiempos de cuarentena se presentan como una oportunidad para reflexionar, discernir y buscar los mejores caminos a seguir como familia, empresa y sociedad. Porque durante estos días volvemos a poner en el centro de todo a las personas”
Justo antes de que comenzará la crisis del coronavirus en Chile, leí un artículo del filósofo español Jordi Pigem donde mencionaba: “Uno de los significados de Krisis en griego era el momento decisivo en el curso de una enfermedad, cuando la situación súbitamente mejora o empeora. Durante siglos se ha hablado con toda naturalidad de la “buena crisis” que conduce a la curación del enfermo o de la “mala crisis”, que lleva a su empeoramiento y muerte. En este sentido una crisis es una oportunidad. Lo único que esta claro en un momento de crisis es que las cosas no pueden seguir igual”.
Hoy en estos días de cuarentena, me pregunto ¿Esa será una buena o mala crisis? ¿Qué futuro crearemos a partir de este momento?
El futuro es una historia que nos contamos hoy y con ello, creamos realidad. En el caso que nos enfoquemos en el miedo y competencia, crearemos un futuro de mayor desunión y desconfianza, será una mala crisis y el virus nos habrá ganado. De lo contrario, si nos enfocamos en fortalecer nuestra capacidad de colaboración a nivel global, podemos mirar este momento como una oportunidad para crecer como personas y sociedad, será una buena crisis e incluso, podríamos crear un futuro más justo y ecológico para todos.
De esta manera, el Covid-19 nos presenta un desafío más profundo que solo un tema sanitario, sino que pone en disyuntiva los paradigmas que hemos seguido las últimas décadas, donde el bienestar se mide por crecimiento económico, y tanto el medioambiente como las personas somos recursos para dicho crecimiento. Pero todo esto se cae cuando un patógeno invisible que no discrimina por nacionalidad o ingresos económicos nos invade, y ahora la seguridad que creímos construir con el bienestar económico, no nos asegura nada.
Si queremos vivir una buena crisis, estos tiempos de cuarentena se presentan como una oportunidad para reflexionar, discernir y buscar los mejores caminos a seguir como familia, empresa y sociedad. Porque durante estos días volvemos a poner en el centro de todo a las personas.
Sentados en el sillón del living, acostados en el dormitorio o en cualquier parte de la casa, llegó la hora de poner pausa y preguntarnos: ¿Qué cosas positivas podrían ocurrir como consecuencia de esta crisis a nivel global, nacional, organizacional y personal? ¿Cómo puedo aportar a crear un mejor futuro?
*Bárbara Ferrer es Consultora en Symnetics