Energías renovables: No nos conformemos
Actualmente se está tramitando en el Congreso un proyecto de ley que busca aumentar la participación de energías renovables en la matriz. El objetivo propuesto para 2025, que consistía en el 20% de esta matriz, ya se alcanzó, pero no nos podemos conformar con eso. (…) El Gobierno ha reiterado la urgencia simple de este proyecto de ley y el Ministro de Energía, Diego Pardow, confirmó que la intención del Ejecutivo es aumentar la meta de producción de las ERNC al 60% para 2030. Ahora, la pelota está en la cancha del Congreso. Los parlamentarios deben entender la relevancia de este proyecto y darle vida lo antes posible.
Hace unas semanas el Sistema Eléctrico Nacional recibió una gran noticia: la promulgación de la Ley de Almacenamiento Energético. Esta ayudará a que Chile siga creciendo en generación de energías renovables, evitando vertimientos de energía verde solo porque, en palabras simples, no había dónde guardarla.
Esta es una buena señal del Gobierno, que muestra compromiso con la transición hacia las ERNC. Pero debemos seguir avanzando y el mundo público tiene una responsabilidad fundamental en esta carrera.
Actualmente se está tramitando en el Congreso un proyecto de ley que busca aumentar la participación de energías renovables en la matriz. El objetivo propuesto para 2025, que consistía en el 20% de esta matriz, ya se alcanzó, pero no nos podemos conformar con eso.
La meta para 2030 es que el 40% de la energía del país sea verde. Teniendo en cuenta la situación actual, en la que más del 35% de la energía producida en Chile ya es renovable, este objetivo se queda corto. Debemos apuntar más alto y acelerar el tranco, pues el planeta ya no puede esperar.
Según el Tercer Informe Bienal de Actualización sobre Cambio Climático (2018), del Ministerio del Medio Ambiente, el 78% de las emisiones en Chile corresponden al sector energético, por lo que es claro que, para transitar hacia un país más verde, esta es el área más importante.
El 9 de noviembre la directora de Chile Sustentable, Sara Larraín, expuso con claridad, ante la Comisión de Energía y Minería de la Cámara Baja, la relevancia de ser más ambiciosos con nuestras metas. Si se dejan como están, el aumento anual necesario para llegar al objetivo establecido para 2030 sería menor al 1% de la matriz energética, lo que es, como lo definió ella misma, “absurdamente bajo y conservador”.
Los importantes avances que hemos tenido no deben dormirnos en los laureles. Hay que seguir creciendo y ser más ambiciosos. El Gobierno ha reiterado la urgencia simple de este proyecto de ley y el Ministro de Energía, Diego Pardow, confirmó que la intención del Ejecutivo es aumentar la meta de producción de las ERNC al 60% para 2030. Ahora, la pelota está en la cancha del Congreso. Los parlamentarios deben entender la relevancia de este proyecto y darle vida lo antes posible.
Ahora, es importante destacar los avances de metas a largo plazo, pero éstas serán inútiles si es que no se trabaja en regulaciones y leyes específicas que permitan mejorar el almacenamiento, transmisión, distribución y procesos de conexión con distribuidoras. Por mucho que se promulguen nuevas leyes, si no se avanza en la implementación técnica de estas, no servirán de nada.