De la mano de una creciente conciencia por el cuidado del medio ambiente, en Chile han surgido pymes que promueven una alimentación sin explotar en exceso los recursos naturales y recurriendo a productos orgánicos. A través de distintas ofertas de productos -tales como harina, repostería, coctelería y hasta sushi vegano- varios de estos emprendimientos además apuestan por un packaging sustentable para generar el mínimo de residuos posibles.

En la medida en que crece el respeto por el medioambiente, en tanto respuesta a la crisis climática, han nacido nuevos emprendimientos que creen en la alimentación saludable, consciente y sustentable. En Chile, al menos, se replican las páginas de Instagram que promueven este tipo de consumo más respetuoso por la naturaleza y, por lo tanto, generan menor impacto a nivel hídrico y de emisiones contaminantes.

La oferta de las pymes es variada: desde sushi vegano hasta repostería con ingredientes naturales, pasando por talleres de alimentación sostenible. Todos, sin embargo, tienen en común una inclinación irrenunciable por el cuidado del medioambiente. Están repartidos por varias ciudades de Chile y, además, muchos de ellos están apostando también por un empaque sustentable para generar el mínimo impacto posible en lo que respecta a residuos. País Circular seleccionó algunos de estos emprendimientos y acá están sus coordenadas.

Veggie Lunch: empanadas veganas

De pino de soya, integral de champiñón y cebolla caramelizada son algunos de los tipos de empanadas que ofrece Veggie Lunch, emprendimiento creado por Ana María Rojas. “Nuestra misión es llevar felicidad alimenticia tanto a veganos como personas omnívoras que buscan una opción más saludable, a través de nuestras empanadas chilenas veganizadas y dulces tradicionales”, dice la emprendedora. Ubicado en la comuna de Puente Alto, Veggie Lunch recibe pedidos para retirar y también realizan despachos a todo Santiago a través de la web www.veggielunch.cl. Junto con ocupar packaging reutilizable o reciclable, la apuesta sustentable de la marca pasa por “no utilizar ningún ingrediente o derivado de origen animal”, ya que “es la base de nuestra alimentación consciente. Desde el principio ha sido nuestro objetivo demostrar que no es necesario dañar a ningún ser vivo para poder comer delicioso y de manera nutritiva”, remata Rojas.

La Caldera Veg: repostería vegana antiautoritaria

“Veganismo contra toda autoridad” es el lema que guía el obrar de La Caldera Veg, que nace como un “espacio seguro, solidario, antiautoritario, amoroso y mágico para mí y quienes adquieren esta comida”, dice Delia Noelia, creadora de este emprendimiento que apuesta por la repostería vegana. “Aquí no se usan ingredientes provenientes de la explotación de otres seres, por eso elegimos el veganismo como estilo de vida, desde lo que comemos, vestimos y pensamos, porque pensamos con empatía y amor”, agrega. Al jugársela por esta opción, cuenta Noelia, “disminuimos las grandes industrias de la carne que contaminan, violentan a otros seres. Se sabe además que lo que se necesita para alimentar al ganado puede producir mejores recursos para la población, como cultivos y uso del agua éticamente”. Realiza tomas de pedidos personalizados en su Instagram y realizan servicio delivery a todo Santiago.

La Panquelita Vegana: coctelería vegana

A través del Instagram de La Panquelita Vegana se puede acceder a un catálogo en el que destaca una vasta colección de productos de coctelería vegana, como brownie, cachitos, tartaletas, calzones rotos, entre otros. Sus creadores Lissett Rebolledo y Joaquín Aliaga promueven el veganismo “como una alternativa viable en cada comida del día o para celebraciones especiales, dando la opción de transformar cada producto no vegano a vegano con sabores similares y mejores”. También cuentan con una oferta de tortas veganas. Hacen despacho a todas las comunas de la capital, y también está abierta la opción de retiro en su taller de la comuna de Santiago Centro. “El impacto ambiental que genera la comida vegana es mínima comparado con la comida de origen animal. Logramos reducir la producción de alimentos que requiere gran cantidad de agua, suelo y energía”, dicen los emprendedores.

Las Montañas: contra la explotación animal

“Ofrecer opciones en su totalidad sin materias de origen animal que es una de las industrias más contaminantes y dañinas con el medioambiente”, es la finalidad de la empresa Las Montañas. En el catálogo de la marca creada por Constanza Morales figuran las alternativas de snacks, repostería y pastelería vegana. Cuentan con distribución a todo el Gran Santiago y alguna parte de las comunas aledañas a la Región Metropolitana. También venta directa. Sobre el propósito de fomentar la alimentación consciente, Morales cuenta que “así logramos reducir demanda en la industria de la explotación animal y promover nuevas industrias y emprendimientos más amigables con el medioambiente. Es importante reducir la huella de carbono que generan los productos traídos del extranjero y promover el apoyo a instancias locales”.

Wunjo Sushi: primer sushi vegano de Chile

En 2012 Cristian Maldonado y Tamara Norambuena abrieron Wunjo Sushi, la primera tienda de sushi vegano de Chile. “Mediante las combinaciones de sabores que hacemos en cada roll, logramos mostrar a todas las personas que se puede comer rico y disfrutar sin necesidad de dañar a ningún anima para ello”, cuentan los emprendedores. Al ser una marca 100% vegana, agregan, “el daño hacia la tierra es mucho menor ya que nuestros insumos e ingredientes son vegetales de producción local”. Pero no solo cuidan el medioambiente con esa opción: optaron por envases reutilizables para sus despachos a todo Santiago y ofrecen la opción al cliente de llevar sus propios envases (funcionan de viernes a domingo). “Además reciclamos todo el aceite que utilizamos, compostamos todos los residuos orgánicos y mantenemos un delivery 90 por ciento libre de plástico y compostable”, cierran.

Colores Veganos: talleres desde Panguipulli

María Fernanda Carranza piensa que una de las grandes lecciones de la pandemia es que “debemos modificar nuestra conducta, ya que se hace insostenible seguir de la misma manera”. Bajo esa motivación, creó Colores Veganos, a través del cual realiza talleres de alimentación saludable y, ahora último, ofrece productos propios. “En cada taller nos enfocamos en maximizar el uso de cada ingrediente: hojas y tallos que terminarían en la basura las aprovechamos para hacer licuados; cáscaras para hacer bebidas fermentadas o vinagres; e incentivamos el uso del compost”, cuenta Carranza, quien este año se mudó desde Santiago a Panguipulli para “vivir en conexión con la Tierra”. Respecto de los productos que venden, María Fernanda se llevó “una grata sorpresa, porque jamás imaginamos que en el sur, un lugar tan estigmatizado por el consumo excesivo de carne, íbamos a tener tanta demanda: “Al disminuir la producción animal, se reducirían las quemas de bosques para liberar terrenos de cosecha de grano destinadas a alimentar animales o instalar megafactorías de cerdos”, remata.

La Fuente Natural: harinas para una alimentación saludable

En 1991 Mónica Risopatrón le compró una empresa a un grupo de alemanes y fundó La Fuente Natural. Hoy en día es una empresa en el que ofrecen harinas saludables (materias primas) para cocinar alimentos saludables: hay una línea sin gluten (harina de almendras con piel, sin piel, maíz, maní y nueces), harina de linaza, de arroz, de trigo fina y gruesa y de centeno (estas 3 son las más usada para hacer panes). No venden productos terminados. “Mi mamá siempre fue una gran cocinera y su idea era hacer entender que se podía comer sano y comer rico”, dice Álvaro González, hijo de la fundadora del emprendimiento. Hoy venden sus productos en todas las cadenas de supermercados del país, incluido el espacio Mundo Bio, la sección de alimentación saludable de Jumbo.

El Camino Dairy Farm: lácteos desde Loncoche

En Loncoche, Región de la Araucanía, Cristóbal Durán mantiene su emprendimiento El Camino Dairy Farm, donde fabrica productos de leche de campo de vacas que solamente comen pasto.  “Siempre hemos creído, desde los cimientos de este proyecto, en un modelo responsable con el entorno, dando especial cuidado a nuestras vaquitas que pasan libremente por el campo. Hacer esto es un desafío enorme, pero sabemos que la alimentación de las personas requiere del máximo cuidado y cariño posible”, cuenta Durán. Los productos lácteos 100 por ciento naturales también se venden en Mundo Bio de supermercados Jumbo. Tienen distribución en Santiago y la Región de Valparaíso, pero a futuro pretenden llegar a todo el país.