Los especialistas aventuran que los edificios ecológicos marcarán el futuro de la arquitectura. Sustentabilidad, reducción de la huella de carbono y la búsqueda de ciudades más amigables con el medio ambiente son cualidades asimiladas por el Mjøstårnet de Nourega, el edificio de madera más grande del mundo, con más de 85 metros de altura y 18 pisos, cuyo arquitecto Øystein Elgsaas, será uno de los principales expositores en la Semana de la Madera 2020 de Madera21 de CORMA.

Los rascacielos de madera son una tendencia mundial que releva el protagonismo de la madera y si bien en Chile nos parecen lejanos o exóticos, ya tenemos ejemplos recientes de modernos e innovadores complejos habitacionales de madera de mediana altura, en el norte, centro y sur del país, que muestran el camino hacia proyectos de gran altura.

El conjunto habitacional y barrio sustentable “Oasis”, en Chañaral, ha sido uno de los proyectos emblemáticos de vivienda social sustentable de alto estándar. En su ejecución unieron fuerzas el Minvu, CIM UC-CORMA y Corfo y el objetivo fue brindar una solución a las familias que resultaron damnificadas por los aluviones del 2015.

Se trata de edificios de tres pisos, que albergan 200 viviendas de madera de 50 metros cuadrados en promedio, y que en su diseño innovador incorporaron muros ventilados que permiten mantener una temperatura interior de entre 16 y 25 C°. Además, cuentan con paneles fotovoltaicos que brindan eficiencia energética y ahorro en consumo de energía para las familias que las habitan.

Más al sur en el sector Lomas Coloradas, comuna de San Pedro de la Paz, Biobío, se levanta el proyecto Horizontes del Pacífico de la empresa E2E, que comprende cinco edificios de cuatro pisos construidos con madera con ingeniería certificada estructuralmente MGP10, impregnada y seca. Cada edificio contará con 16 departamentos para 80 familias y destaca por ser los primeros edificios habitacionales de madera chilenos con sistema industrializado. El primer edificio ya está montado y próximamente seguirán con la construcción de los otros cuatro.

“Esta nueva forma de construir en madera ha significado disminuir los residuos y transporte, menos emisión de Co2 y no utilizar agua. Además, su estructura es totalmente de madera certificada, material renovable y muy resistente”, dice Felipe Montes, gerente general de E2E.

El profesional comenta que este tipo de edificación es la respuesta para ciudades lluviosas y de alta humedad. “Optamos por esta modalidad porque el diseño de la estructura se pensó en una zona lluviosa, queremos lograr departamentos con excelente comportamiento térmico, sin aislamiento térmico exterior, sustentables y al usar este sistema industrializado podemos construir más rápido y realizar la mayor cantidad del trabajo y las terminaciones en la misma fábrica y no en obra”.

Agrega que “la industrialización del proceso tiene la ventaja de poder planificarse muy bien para poder construir rápidamente y en climas adversos”.

En la ciudad de Linares, Región del Maule, se levantará otro proyecto en madera. Se trata de un edificio de cinco pisos, de alto estándar, enfocado en familias que opten al programa de Integración Social.

Al respecto, el jefe de la División Técnica de Estudio y Fomento Habitacional (Ditec) del Ministerio de Vivienda, Erwin Navarrete, cuenta que actualmente se trabaja en la licitación de la obra que se sumará a otro proyecto habitacional social, consistente en un condominio de edificios de madera de mediana altura de cuatro a seis pisos, en Rancagua, Región de O´Higgins.

El moderno edificio corporativo de CMPC en Los Ángeles, de 5.500 m2 de oficinas y otras dependencias, construido principalmente en madera; o la torre de madera de Peñuelas son otros ejemplos de experiencias nacionales de edificios eco sustentables.

Innovación, la clave

Hoy la construcción habitacional en madera de alto estándar ya alcanza al 20% en el país.

El ministro de Vivienda, Felipe Ward, dijo que “no hay dudas en torno de los atributos que tiene la madera como un material noble de construcción, cuyo uso en edificaciones se ha vuelto cada vez más común. Ya hemos visto buenos resultados en proyectos piloto de dos pisos, otros de mediana altura –cuatro pisos- y nuestro siguiente paso es avanzar en la construcción de gran altura”.

Idea que entusiasma al presidente de CORMA, Juan José Ugarte. Arquitecto de profesión y uno de los principales impulsores de la construcción en madera en Chile, sostiene que es clave derribar mitos sobre este material y profesionalizar su uso en la construcción, “ya que cada 35 días, los bosques chilenos entregan madera para construir 500 mil casas, lo suficiente para superar el déficit habitacional del país y además contribuir a lograr que Chile sea carbono neutral”, sostiene el dirigente gremial.

Por su parte, el jefe de la Ditec explica que han ido desapareciendo los mitos en torno a la madera y la errada percepción de ser un material vulnerable. “La forma en que se valora la construcción en madera ha ido cambiando radicalmente, gracias al potente desarrollo normativo que hemos logrado, en un trabajo conjunto con organismos públicos, privados y la academia, sumado a que hoy existen en el país tecnologías avanzadas para construir en madera”.

Visión que comparte el subdirector del Centro de Innovación en Madera CIM-UC CORMA, Felipe Victorero. Señala que la renovación y actualización de la normativa de construcción en algunos países europeos permitió avanzar hacia soluciones constructivas de alto estándar y esto ha impulsado que hoy, por ejemplo, la edificación en madera llegue al 24% en Inglaterra.

“En las últimas décadas en Europa hubo un cambio de paradigma que también se va a dar en Chile donde vamos a ver que la edificación a mediana altura en madera va a empezar a proliferar, principalmente de la mano de mayores estándares en torno a la eficiencia energética, sustentabilidad y mayor compromiso con el medio ambiente”, dice Victorero.

Para ambos profesionales, la innovación tecnológica ha sido clave para avanzar en construir en madera, lo que ha permitido actualizar 42 normas que tienen relación con la madera. Además se han puesto a disposición de los diseñadores 149 soluciones constructivas acreditadas para los listados de fuego, térmico y acústico para edificación de hasta seis pisos.

Para el jefe de la Ditec del Minvu, el alto estándar de la construcción en madera debe plantearse desde la innovación, industrialización y sustentabilidad.

“La madera tiene los atributos necesarios para transformarse en el material constructivo del futuro, dadas sus características sostenibles específicas. Su buen desempeño térmico, así como su capacidad de captura de CO₂ y liberación de oxígeno, la hace un material con baja huella de carbono”, subraya.

Estas ventajas ecosustentables de la madera en comparación al hormigón y al acero aventuran un futuro promisorio para la industria en nuestro país.

El subdirector del Centro UC de Innovación en Madera-CORMA, Felipe Victorero destaca la buena percepción de confort y vivienda de mejor calidad que tienen los usuarios.

“Proyectos concretos como Chañaral, la torre experimental Peñuelas o aquellos que están abordando otras universidades y empresas en torno a la edificación en madera contralaminada, en mayor altura, demuestran que el CLT es un producto de primer nivel y en la medida que la gente se vaya familiarizando, conociendo y comprendiendo estos proyectos icónicos se irán rompiendo estos estigmas culturales, se verá  efectivamente a la madera como material de alto estándar y muy sofisticado”, señala el subdirector del CIM-UC CORMA.