Cómo aprovechar las precipitaciones que trae el Fenómeno de El Niño
Guillermo Donoso, académico de la Universidad Católica, explica que la construcción de nuevos embalses no es una alternativa viable y que la mejor forma de aprovechar las lluvias en el corto plazo encuentra su respuesta en las Soluciones basadas en la Naturaleza. Entre ellas menciona las obras para recarga de napas subterráneas y reforestación de la precordillera con especies nativas resistentes a las sequías. “Se requiere una gestión hídrica que considere el manejo de los acuíferos como embalses naturales y generar extensas zonas de recarga”, señala el especialista, integrante del Centro de Derecho y Gestión de Aguas UC.
Las fuertes precipitaciones de fines de junio en gran parte de la zona centro-sur del país, así como las que ya comenzaron esta semana, confirman la llegada del Fenómeno de El Niño, evento que se caracteriza por un aumento en la temperatura del océano Pacífico y, junto con ello, una mayor incidencia de lluvias. Si bien el país lleva una extensa temporada de sequía, las primeras lluvias relacionadas con este evento climatológico han evidenciado, una vez más, el escaso nivel de preparación que tiene Chile frente al cambio climático.
Está previsto que El Niño se extienda hasta comienzos de 2024 y, aunque no va a acabar con la megasequía, surge la inquietud en relación a la posibilidad de aprovechar de algún modo las precipitaciones esperadas para este invierno para reducir los efectos de la escasez hídrica ¿Vale la pena construir más embalses para evitar un futuro racionamiento de agua?
No. Así de tajante responde el director del Departamento de Economía Agraria de la Universidad Católica e integrante del Centro de Derecho y Gestión de Aguas UC, Guillermo Donoso. Si bien reconoce que los embalses son una alternativa para reservar agua para años secos, esto no aplica cuando los periodos de sequía son extensos, como en el actual caso de Chile, con más de 13 años de drástica reducción de precipitaciones.
“Los embalses son proyectos caros, financieramente, y se demoran varios años en concretarse. Además, nuestra legislación para grandes obras hidráulicas data -sin cambios- desde hace más de 40 años (…) Por esto los embalses no son una alternativa en el corto plazo, para aprovechar las mayores precipitaciones que trae el Fenómeno de El Niño”, explica Donoso.
“En la Región Metropolitana existe un descenso sostenido en los niveles de los acuíferos. Esto se debe a que el déficit de aguas superficiales se suple a partir de reservas subterráneas, con aumentos significativos en las extracciones”.
Soluciones basadas en la Naturaleza
El académico destaca que, considerando que las isotermas cero (donde la precipitación deja de ser agua y comienza a ser nieve) son a mayor altura, la acumulación de nieve en la cordillera disminuirá y las reservas naturales de agua serán más escasas. Por esto plantea una serie de Soluciones basadas en la Naturaleza (SbN), que son de bajo costo, menores impactos ambientales y sociales, y aplicables en el corto plazo, lo que permite aprovechar la próxima época más lluviosa.
“Una de estas soluciones es la infiltración de acuíferos, o aguas (napas) subterráneas. Esto requiere una gestión hídrica que considere el manejo de los acuíferos como embalses naturales y generar extensas zonas de recarga de acuíferos, como las piscinas decantadoras en la Quebrada de Macul, que además demostraron su efectividad como protección de aluviones”, detalla Donoso.
Esta recarga de las aguas subterráneas es de vital importancia para abordar de forma sustentable la sequía que afecta a la zona centro-sur de Chile. El integrante del Centro de Derecho y Gestión de Aguas UC explica que en el caso de la Región Metropolitana existe un descenso sostenido en los niveles de los acuíferos, con zonas que presentan una tasa de descenso de cuatro metros por década.
“Esto se debe a que el déficit de aguas superficiales se suple a partir de reservas subterráneas, con aumentos significativos en las extracciones, pero es posible implementar medidas para la recarga artificial de los acuíferos. La Sociedad del Canal del Maipo, la Confederación de Canalistas de Chile y la Comisión Nacional de Riego son algunas instituciones que han desarrollado proyectos piloto de recarga artificial, como el llenado de áreas de acumulación de aguas o piscinas naturales acumuladoras”, agrega el experto.
Otra medida en la misma línea es mantener los canales de riego sin revestimiento, dice Donoso. La “ineficiencia en conducción”, que hace referencia a que el usuario recibe menos agua porque “se pierde” en el trayecto, es un beneficio para la recuperación hídrica. Esto debido a que los canales de riego, al no contar con revestimiento de concreto, permiten que el agua pueda infiltrarse y llegar hasta los acuíferos.
En la misma línea de recargar los acuíferos, la reforestación también es clave. Más concretamente, es necesario recuperar vegetación en la precordillera con especies nativas esclerófilas (resistentes a periodos de sequía y calor). Guillermo Donoso detalla que plantar más especies de este tipo reduce la velocidad de escurrimiento y el arrastre de sedimentos, por lo que además disminuye la probabilidad de crecidas e inundaciones repentinas.
Educación, pilar clave
Otra medida efectiva para aprovechar el Fenómeno de El Niño es aumentar la capacidad de flujo de los caudales en los ríos y esteros, pero para que esto ocurra es fundamental su limpieza y mantención, además de la educación a la población.
“Durante las últimas precipitaciones observamos cómo las autoridades de diferentes instituciones retiraron basura desde el sector de El Noviciado (Pudahuel). Los días en que no estamos con precipitaciones, lo que se debería hacer es limpiar el estero completo para prepararnos para el próximo sistema frontal, además de educar a la población para evitar los vertederos ilegales e intensificar la fiscalización”, indica el académico UC.
En el lecho del Mapocho, casi 900 toneladas de basura fueron retiradas tras las precipitaciones de fines de junio. La acumulación de basura provocó que el cauce del agua tomara otro rumbo e inundara diferentes casas en el sector de El Noviciado.