El pasado 2 de enero ingresó el mensaje presidencial Boletín N° 16500-21 que establece nueva Ley General de Pesca y deroga disposiciones que indica. El proyecto establece una nueva ley general de pesca y deroga el decreto N° 430, del Ministerio de Economía, Fomento y Reconstrucción, que fija el texto refundido, coordinado y sistematizado de la ley N° 18.892, de 1989 y sus modificaciones, Ley General de Pesca y Acuicultura, que actualmente regula la materia.

La iniciativa tiene múltiples objetivos entre los cuales encontramos establecer un régimen jurídico general sostenible, transparente y equitativo de la actividad pesquera; promover la preservación, conservación y uso sostenible de las especies hidrobiológicas y sus ecosistemas; fomentar el consumo humano directo de recursos hidrobiológicos; promover la equidad de género en el sector; fomentar la investigación científica para la toma de decisiones en la administración y conservación de las especies hidrobiológicas; reconocer y respetar los conocimientos tradicionales de la pesca artesanal y de subsistencia; y prevenir y desincentivar la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada.

El proyecto señala que los principios de la nueva ley general de pesca son la sostenibilidad, el principio científico, el precautorio, el preventivo, el enfoque ecosistémico, la urgencia climática, la seguridad alimentaria, la trazabilidad sanitaria e inocuidad alimentaria, la equidad de género, la transparencia, la participación, la prevención y desincentivo de la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada y el respecto de la cultura de la pesca artesanal.

Uno de los pilares fundamentales de la iniciativa de ley es reforzar el rol de la ciencia para la administración, conservación y asignación de los recursos hidrobiológicos. Para lograr que la gestión de las especies hidrobiológicas se realice en base a la mejor información científica disponible, la propuesta fortalece la ciencia para la gestión de los recursos pesqueros, entre ellos lo que hace es dar preeminencia del principio científico en las decisiones de administración y conservación de los recursos hidrobiológicos -obligación de planes de manejo para todas las pesquerías; fraccionamiento de los recursos en base a criterios científicos-, además fortalece la investigación pesquera -estable programas de investigación permanente y temporal-, y por último busca el fortalecimiento de las instancias científicas asesoras de la Subsecretaría asegurando su independencia e integrando nuevas perspectivas -fortalecimiento de los comités científicos técnicos y creación de un Comité Científico Técnico de Pares-.

El proyecto propone un marco regulatorio que promueve la competencia entre agentes de la pesca industrial. Para ello, se establece un sistema que aumenta sustancialmente la asignación competitiva de los recursos a través del incremento de las subastas públicas y el establecimiento de normas claras y modernas para el desarrollo de éstas, además de crear sistemas de registro, que permita generar certidumbre entre los agentes de mercado. En concreto establece un nuevo sistema de licencias transables de pesca- en el cual señala un aumento de las licitaciones para la asignación de los recursos; modernización y perfeccionamiento de las reglas que rigen las subastas; modificación de la duración de las licencias; dinamización de los criterios históricos de asignación; simplificación y modernización de la forma de cálculo del impuesto específico-, por otra parte indica la modernización de los registros industriales y la protección de los trabajadores de la industria ante cambios normativos, dentro del cual señala que los tripulantes industriales podrán inscribirse en el Registro Pesquero Artesanal; y la protección de los trabajadores de la industria en las nuevas licitaciones.

Además, la iniciativa hace un reconocimiento cultural de la actividad de la pesca artesanal señalando que es de gran importancia social, económica y cultural, la que se manifiesta principalmente por su contribución a la fuerza laboral, a las economías territoriales y al abastecimiento de productos pesqueros para consumo en fresco. El proyecto incluye la protección de la primera y las primeras cinco millas marítimas; una dinamización del Registro Pesquero Artesanal; criterios de equidad para la distribución de la fracción artesanal que acrece -busca la promoción de la equidad interregional; la promoción de la equidad intrarregional-, y por último el reconocimiento de las organizaciones de la pesca artesanal.

Además, señala que, reconociendo la relevancia y especificidad de la actividad de la acuicultura, el proyecto contempla una completa estructura de normas transitorias que aseguran que las definiciones, infracciones y, en general, todas las instituciones y normas que regulan simultáneamente la actividad pesquera y acuícola mantendrán su vigencia en lo respectivo a su regulación acuícola, mientras no sea publicada en el Diario Oficial la nueva Ley General de Acuicultura.

Por último, la propuesta establece una serie de normas que permitirán llevar adelante una transición ordenada hacia el nuevo régimen de acceso a la actividad pesquera.

Boletín N° 16500-21