Biobrush: la empresa que promueve la higiene bucal a través de tecnología, innovación y respeto al medioambiente
Si bien al principio la startup comenzó con cepillos de bambú, a partir de 2020 incorporó otros productos de higiene dental como sedas dentales, limpiadores de lengua y, dentro de algunos meses, enguajes bucales, siempre con el norte en el cuidado al planeta. Además, Biobrush tiene una variable social: 1 de cada cuatro cepillos vendidos en la web es donado a fundaciones. Actualmente están iniciando su etapa de expansión a Latinoamérica.
![Cristian González Farfán](https://www.paiscircular.cl/wp-content/wphb-cache/gravatar/2da/2da129e0638119e0bfca2e370e2ea83ax100.jpg)
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Cuando Biobrush vio la luz en 2016 tuvo que luchar de entrada contra una tendencia muy asentada en la sociedad, y que no es otra cosa que el uso masivo de cepillos de plástico. Para intentar modificar esa conducta, la odontóloga y cofundadora de la startup, Camila Giglio, desarrolló cepillos de bambú bajó los estándares de la American Dental Association y añadieron un compuesto tecnológico desarrollado en Chile, gracias al apoyo de CORFO: las nanopartículas de cobre en el mango que inhiben la presencia de hongos y bacterias.
Desde luego, el cambio del bambú por el plástico evitaba que estos últimos productos partieran irremediablemente a los vertederos. Por el contrario, el bambú se podía compostar en las casas o, cuando menos, echar en la tierra al lado de las plantas.
En 2020, en pleno climax de la pandemia, los cofundadores de Biobrush decidieron ampliar su catálogo de productos de higiene bucal. A partir de ese momento comenzaron a producir seda dental, limpiador de lengua, cepillos interproximales y todo lo necesario para el mundo odontológico, con el fin de transformarse en una “plataforma de desarrollo de productos de higiene, a través de la innovación, tecnología y economía circular”, como dice su CEO y cofundador, el ingeniero comercial Iñaki de Urruticoechea.
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“Queremos convertir esto en un producto masivo y sabemos que no toda la gente tiene una compostera en la casa. La idea es que puedan sacar los filamentos y, si no tienen compostera, hundir los cepillos en la tierra o ponerlos al lado de una planta. Son opciones más cotidianas, pero la compostera es la mejor solución porque es la más eficaz”.
“Comenzamos con el cepillo y notamos que había una creciente conciencia por parte de las personas con respecto a la higiene dental y el medioambiente. El plástico es muy contaminante, y cada vez crece la gente que busca este tipo de productos más sustentable. Lamentablemente la oferta es poca y a eso apuntábamos”, comenta De Urruticoechea a País Circular.
También incluyeron cotonitos y desmaquilladores como nuevos productos que exceden la higiene bucal, y eso es lo que quieren plantearse para mediados de 2023: ser una startup que abarque el concepto íntegro de la higiene. “Después buscaremos una línea de higiene de bebé, del hogar, higiene capilar, entre otros”, asegura el emprendedor. Así, sus cofundadores -también se encuentra entre ellos el ingeniero comercial Christian Fontecilla- pretenden lograr la internacionalización de Biobrush. “Estamos en conversaciones en México con una importante cadena de Retail y también en conversaciones con un aliado estratégico para USA”, declara.
El bambú utilizado
Con respecto a su línea pionera de cepillos de bambú, las preguntas que surgieron al principio se asomaron en forma de oraciones gramaticales: “Un cepillo de dientes puede tardar mil años en degradarse (si es que lo hace), “El primer cepillo de dientes que utilizamos sigue dando vuelta en el planeta” y “Un odontólogo puede recetar hasta 400 cepillos plásticos al mes” figuraron entre las observaciones que hicieron los creadores de Biobrush.
Otra de las características que los conecta con el tema medioambiental es que el bambú utilizado para confeccionar los cepillos es el bambú moso, el cual tiene un muy rápido crecimiento y produce mayor porcentaje de oxígeno que otras plantas. “No es el alimento del oso panda debido a que sus hojas crecen a gran altura”, aclara De Urruticoechea. Además, el bambú utilizado tiene la certificación internacional FSC que confirma que éste viene de bosques sustentables. Todo el resto de los productos, incluidos los cepillos, pasan por varias certificaciones: Bureau Veritas, SGS, Peta & Vegan de libre testeo animal. A su vez, están en proceso de su validación para integrar el Sistema B.
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“Comenzamos con el cepillo y notamos que había una creciente conciencia por parte de las personas con respecto a la higiene dental y el medioambiente. El plástico es muy contaminante, y cada vez crece la gente que busca este tipo de productos más sustentables”.
Del mismo modo, Biobrush tiene una componente social muy desarrollada: 1 de cada 4 cepillos vendidos por la web (todos los productos se venden online y de manera presencial en las cadenas de supermercados Líder y Jumbo, farmacias Knop y otros locales) es donado a fundaciones benéficas como Teletón, Fundación Abrázame, Hogar de Cristo, actividades con niños en África y Odontoruteros, entre otras.
Otro detalle importante es que Biobrush cuenta con un depósito en la comuna de Vitacura donde los clientes pueden ir a depositar los cepillos de esa marca que ya fueron usados, si es que no pueden enterrarlos ellos mismos en sus casas. “Recibimos nuestros cepillos, ya sea con los filamentos o no. Los filamentos se deben lavar y sacar con un alicate, pero nosotros mismos los podemos reciclar”, estima De Urruticoechea.
“Nosotros queremos convertir esto en un producto masivo y sabemos que no toda la gente tiene una compostera en la casa. La idea es que puedan sacar los filamentos y, si no tienen compostera, hundir los cepillos en la tierra o ponerlos al lado de una planta. Son opciones más cotidianas, pero la compostera es la mejor solución porque es la más eficaz”, resalta el emprendedor.
De Urruticoechea se muestra contento por los logros alcanzados. “Hemos logrado desarrollar distintas líneas de producto siguiendo nuestros valores ecofriendly; hoy contamos con sedas dentales biodegradable y vegana, limpiador de lenguas reutilizable, cotonitos de bambú, cepillo de dientes eléctrico con distintas funciones y cabezales de bambú intercambiables, cotonitos de bambú, aplicadores de hilo dental, interdentales de bambú, entre otros”. Ahora se alistan para, quizás en febrero próximo, lanzar al mercado un enjuague bucal cuyo packaging será reciclable.