Vopero llega a Chile con la misión de revalorizar, reposicionar y recircular la ropa de segunda mano para cuidar el medio ambiente
Una importante inversión de Cencosud Ventures en la startup uruguaya Vopero abrió las puertas para su llegada al país, donde estará presente mediante su marketplace, así como en los canales digitales y algunas tiendas de Paris, como parte de su programa Moda Circular. Se trata de una iniciativa que ya está en Uruguay y México, donde ha consolidado un modelo de venta y compra de artículos de moda de segunda mano, de reconocidas marcas, a precios convenientes y calidad garantizada. “La única manera de construir un futuro sustentable para el mundo de la moda es cerrando el círculo y permitiendo que todas esas prendas que ya existen, recirculen dentro de nuestro sistema”, comenta a País Circular la co-fundadora de Vopero, Maggie Ferber.
La moda sostenible no es solo una “moda”, sino una tendencia creciente e imparable que obedece tanto a la necesidad de reducir el impacto ambiental negativo de esta industria, como a la conveniencia económica y social que suponen prácticas de la economía circular como reparar, reutilizar, o invertir en prendas de mayor durabilidad, entre otras.
En este contexto, la ropa y accesorios de segunda mano se han convertido en un mercado tanto o más apetecido que el de primera mano. Así, lo que comenzó con pequeños emprendimientos, está ya en una etapa de expansión internacional gracias a la incorporación de tecnologías, talento profesional e importantes inversiones. Es el caso de la empresa uruguaya Vopero, que ya opera en México y, a partir de diciembre, estará en Chile, de la mano de Tiendas Paris y Cencosud Ventures.
Fue hace unas tres semanas que Cencosud Ventures anunció una inversión de cuatro millones de dólares en dicha startup, que nació en Montevideo a fines de 2020 con la misión de “inspirar a una nueva generación de consumidores en Latinoamérica a elegir segunda mano”, y que en solo tres años ha logrado expandirse a tal punto que ya han pasado por la plataforma más de 1,5 millones de prendas de ropa que, de otro modo, probablemente estarían inmovilizadas en un ropero o irían a dar a la basura.
El nombre “Vopero” surge de la combinación de las palabras “virtual” y “ropero” y, en términos simples, es una plataforma que permite vender y comprar moda de segunda mano con calidad garantizada y a precios muy convenientes. Si bien una de sus características ha sido el desarrollo de tecnología y digitalización del proceso de compra-venta, desde el año pasado también operan mediante canales físicos en centros comerciales. De las prendas que llegan, no todas pasan el exigente control de calidad, por lo que las vendedoras tienen la opción de que esa ropa sea enviada a otros destinos, como donaciones.
Maggie Ferber (30), co-fundadora de Vopero, comenta a País Circular que la idea “nace de una tendencia ya bastante desarrollada, que es la industria de la reventa en Estados Unidos y en Europa. La reventa, o los modelos de ‘circularidad’, hacen que la sustentabilidad sea accesible a todos, en una propuesta de valor muy interesante para el consumidor: compra inteligente, compra sustentable, compra accesible, compra de calidad”. Uno de los primeros desafíos, añade, fue adaptar para el mercado latinoamericano los modelos analizados.
“Vopero es un movimiento que genera movimiento. Movemos moda que estaba estancada. La revalorizamos. Le damos un nuevo destino, un nuevo propósito. Esto hace un bien enorme al planeta y a la industria, ya que abre un nuevo canal y democratiza, de manera respetuosa, todas las marcas desde Zara hasta Prada”, señala Ferber, quien fundó la marca junto a Alejandro Esperanza y Ignacio Cattivelli.
“Es clave cambiar el consumo, no desacelerándolo, sino haciendo que recircular moda sea la nueva moda, ya que comprar y usar un ítem de segunda mano versus uno nuevo, reduce las emisiones de carbono en un promedio de 25%”.
Impacto ambiental, social y económico
Consultada sobre los beneficios para el medio ambiente, la emprendedora uruguaya se refiere, primero, a los problemas que la industria de la moda -en términos generales- tiene en esta materia. Primero, la sobreproducción, con 100 billones de prendas al año para una población mundial de 8 billones de personas. Segundo, el sobreconsumo: “cada segundo, en algún lugar del mundo, el equivalente a un camión de basura lleno de ropa se tira o se quema. Y el promedio de uso de estas prendas que se descartan son 7 usos”.
Para solucionar lo anterior, dice, hay que llegar antes de que las prendas terminen en el basurero y educar al consumidor a cambiar sus hábitos. “Ahí es donde entramos nosotros, dado que la prenda más sustentable es la que ya existe, y existen suficientes prendas en el mundo para vestir a varias generaciones, sin producir nada adicional. Es clave cambiar el consumo, no desacelerándolo, sino haciendo que recircular moda sea la nueva moda, ya que comprar y usar un ítem de segunda mano versus uno nuevo, reduce las emisiones de carbono en un promedio de 25%”.
“En Vopero hemos procesado más de 1,5 millones de prendas, que no terminaron en un basurero, sino re-circulando. Hemos donado más de 500 mil prendas que no pasaron el control de calidad y las vendedoras optaron por donarlas a distintas fundaciones y causas sociales (para esto existe en la App la funcionalidad “impacta”). Y eso es solo el inicio de la huella que vinimos a dejar en Latinoamérica”, señala Ferber, quien hace un par de meses fue portada de la revista Forbes Uruguay por el éxito de Vopero.
“Las prendas que usamos tienen el poder de generar impacto. Y las que no usamos también”, resume la emprendedora y detalla que “de prendas que estaban ocupando espacio en los roperos, pasamos a mover un sistema gigante de recirculación que impacta positivamente el medio ambiente, la economía, y la sociedad”.
Respecto a su llegada al mercado chileno, la joven empresaria cuenta que lo que más les emociona “es el altísimo grado de consciencia ambiental que tienen los consumidores (…) Eso es algo que no veíamos en Uruguay y México al comenzar. Tuvimos que hacer un trabajo en los otros mercados, convenciendo a clientes que vendan por primera vez sus prendas, y a clientes que compren por primera vez ropa de segunda mano”.
“En Uruguay, al ser un país de 3 millones de habitantes, se vio un cambio sustancial, un antes y un después de la aparición de Vopero en el rubro moda. En México, sabiendo que el potencial era y sigue siendo infinito, tuvimos que trabajarlo desde un lugar de la confianza, abriendo canales físicos de toma de mercadería y de venta al público. Esperaríamos de Chile desafíos similares, para generar confianza en los usuarios de que somos una plataforma seria, que llegó para quedarse, y demostrarlo con hechos, con la experiencia ‘wow Vopero’, que mantenemos como estándar de calidad y exigencia para que el cliente se sorprenda positivamente de ser parte de este cambio cultural”.
A partir de diciembre, Vopero estará en Chile con su marketplace, en los canales digitales de Paris y en las tiendas Paris de los mall Alto Las Condes y Parque Arauco. En un principio solo incluirán moda mujer, “ya que representa la mayor parte del consumo de moda y es a través de la mujer que se abren las avenidas de hombres y niños”, explica Ferber y añade que “sin duda” en Chile irán creciendo y evolucionando hacia otros públicos, que ya funcionan bien en los mercados de Uruguay y México.
“La elección de Vopero tiene su justificación en querer asociarte con partners con los que compartas valores y sinergias en beneficio del negocio. (…) Su negocio se alinea con parte del propósito de Paris, que es fomentar la moda circular y democratizar el consumo responsable a lo largo de toda su operación”.
Valores y sinergias compartidas
Llegar al país de la mano de Paris y Cencosud tiene para Vopero una serie de beneficios, pues están alineados en diversos aspectos, comenta Ferber, partiendo porque “tienen en su ADN la sostenibilidad y circularidad como parte de sus pilares, y compartimos ese propósito”. Asimismo, la empresaria uruguaya destaca la capilaridad de puntos de venta de Paris, que abarca gran parte del país, lo que los alinea “desde el punto de vista del negocio y la expansión potenciada por su peso en el mercado chileno”. Y en cuanto al alineamiento en innovación, destaca que “Cencosud Ventures está enfocado en potenciar startups que crezcan junto al grupo para construir el futuro de retail”.
El Head of Cencosud Ventures, José Pascual, comentó que “al ser Cencosud una empresa global, con presencia en siete países, estamos constantemente observando posibilidades de inversión en los distintos países donde operamos”. En ese sentido, la apuesta por Vopero para invertir responde al hecho de que vieron en ellos a un socio estratégico que podía potenciar las iniciativas de sostenibilidad de Paris, la unidad de negocios de tiendas por departamento de Cencosud.
“La elección de Vopero tiene su justificación en querer asociarte con partners con los que compartas valores y sinergias en beneficio del negocio. (…) Su negocio se alinea con parte del propósito de Paris, que es fomentar la moda circular y democratizar el consumo responsable a lo largo de toda su operación”, agregó Pascual y enfatizó que “esta nueva inversión viene a potenciar el programa Moda Circular de Paris”.
Al respecto, la gerenta de Clientes y Sostenibilidad de Paris, Fernanda Kluever, explica que dicho programa, que comenzó en 2021, “busca instaurar nuevos modelos de negocio que nos permitan, de una manera rentable, entregar alternativas sostenibles para satisfacer la demanda por la moda y el vestuario; y así fomentar alternativas a la compra de productos nuevos”.
En concreto, Moda Circular se compone de 4 servicios: compra segunda mano, vende tu ropa, repara y personaliza e intercambia. “Alargar la vida útil de nuestras prendas es sin duda la mejor opción, luego viene la alternativa del reciclaje textil, disponible en todas nuestras tiendas durante todo el año, desde el 2013”, dice Kluever.
La gerenta entrega, además, algunas cifras que dan cuenta de los buenos resultados de esta “nueva forma de hacer las cosas”: al 2022 triplicaron las unidades reinsertadas al ciclo económico (2018: 150.495 / 2022: 555.172); vendieron más de 60.000 prendas de segunda mano; más de 80.000 clientes pusieron a la venta sus prendas; lograron más de 7.000 prendas reparadas o customizadas; más de 10.000 prendas intercambiadas y más de 1.000 toneladas de textil reciclados (desde el inicio del programa).
“El programa Moda Circular de Paris busca instaurar nuevos modelos de negocio que nos permitan, de una manera rentable, entregar alternativas sostenibles para satisfacer la demanda por la moda y el vestuario; y así fomentar alternativas a la compra de productos nuevos”.
Camino sin retorno
Kluever enfatiza, asimismo, los beneficios que tendrá para los clientes de Paris la llegada de Vopero a Chile: “Tendrán la posibilidad de comprar y revender prendas únicas en Latinoamérica, acercando la moda sostenible y las marcas a las personas a través de los canales físicos y digitales de Paris. Con ello, se potenciará el programa de Moda Circular, incentivando la moda sostenible y preferencia por ropa de segunda mano”.
En este sentido, quienes fomentan la moda sostenible subrayan que la prenda más sostenible es la que ya existe, algo que en Vopero suscriben completamente. “La única manera de construir un futuro sustentable para el mundo de la moda es cerrando el círculo y permitiendo que todas esas prendas que ya existen, recirculen dentro de nuestro sistema”, destaca la co-fundadora de la startup uruguaya.
“Buscamos revalorizar y reposicionar a la segunda mano en la mente del consumidor, con un concepto distinto a lo que se imaginan, para así derribar prejuicios y preconceptos. Esto no es segunda mano. Esto es ‘como nuevo’. Esto es mejor que nuevo. Esto es moda. Esto es marca. Esto es calidad. Esto es el futuro de la moda”, enfatiza Maggie Ferber.
La emprendedora dice que algo clave para avanzar en este modelo es generar confianza entre quienes apuestan por primera vez a comprar algo de segunda mano y, por esta razón, “solamente listamos prendas de marcas conocidas y que están en perfectas condiciones, como si estuvieran nuevas”. De ese modo, concluye, los clientes, “una vez que empiezan, es un camino de ida”.