Queltehue y Tricahue: los buses eléctricos cero kilómetro de uso minero fabricados por Reborn
Actualmente la empresa tiene una flota de 104 de estos buses nuevos con motor eléctrico -72 Queltehues y 32 Tricahues- funcionando en la División El Teniente de Codelco. Desde 2022 está operativa una fábrica en Rancagua desde donde se instalan las nuevas funcionalidades . Con respecto a los buses reconvertidos de diésel a eléctricos, la marca espera que se apruebe la normativa del Ministerio de Transporte para que éstos puedan ser una alternativa de transporte privado o público. Reborn es una de las 15 empresas chilenas invitadas por ProChile a exponer en la COP28 de Dubai, que empezó ayer.
El símbolo de Reborn Electric Motors es un ave fénix, porque implica el renacer de los vehículos hacia un sistema cero emisiones, y eso se entrelaza -de forma ornitológica- también con los dos modelos de buses que hoy están operando en faenas mineras: Queltehue y Tricahue, dos aves chilenas. Son 104 de estos buses -72 Queltehues y 32 Tricahues- los que hoy comprenden la flota que traslada a trabajadores/as de la División El Teniente de Codelco. Tienen en común que son vehículos cero kilómetro con motores eléctricos y fabricados en Chile.
Si bien en principio tenían buses reconvertidos de motores diésel a eléctricos, en esta etapa de desarrollo de la empresa han puesto el foco en esta flota de vehículos cero kilómetros que son codesarrollados con la fábrica de chasis de Mercedes Benz en Brasil, con la que codiseñan los ejes, las ruedas y los asientos. Esos buses llegan a Chile y en la fábrica que inauguraron en 2022 en Rancagua “les instalamos el motor eléctrico, la batería, el software, el sistema de control y todo lo que permite que el vehículo se mueva. El armado y el diseño es fabricado en Chile”, explica Ricardo Repenning, cofundador y COO de Reborn Electric Motors.
“Los buses son electrificados en Chile. Esto quiere decir que la instalación de los componentes, baterías y motorización se realiza en nuestra fábrica. Esto nos permite enumerar nuestros productos con Número de Identificación Vehicular (VIN, por sus siglas en inglés) nacional”, especifican en la página web de Reborn.
Contar con una fábrica propia ya es un gran impulso para el crecimiento de Reborn. En esos 3.000 metros cuadrados en la capital de O’Higgins tienen la capacidad de fabricar hasta 200 buses al año. “Tenemos la convicción de que ambas líneas, las de buses nuevos y reacondicionados, tienen espacio en nuestra empresa. En una carrocería nueva, cero kilómetro, el costo de inversión es mayor; en cambio, el de economía circular, de un bus que era diésel, podría reducir en 40-45% el costo de inversión. Esto abre la puerta de que estos últimos sean mas masivos”, agrega Repenning.
Al mismo tiempo, dentro de esos buses nuevos de la línea Queltehue, están ad portas de lanzar el “Queltehue 2024”, que mejora las condiciones no solo para la minería, sino potencialmente para el turismo. “Mejoramos los asientos, la puerta y tenemos una separación entre el conductor y los pasajeros para que no entre polvo a la cabina. Es un bus más apto para minería pesada en rajo y para el turismo es más ejecutivo de salón”, describe el COO de Reborn, para quien este bus también se puede aplicar en industrias como la salmonera, forestal o vitivinícola, por ejemplo, “en el turismo de viñas”. Del mismo modo, están analizando la posibilidad de emprender proyectos que incluyan hidrógeno verde en la movilidad de los buses.
En cuanto a sus características, Queltehue tiene una capacidad para 24 pasajeros, cuenta con un tiempo de carga de 45 minutos y una autonomía de 200 kilómetros. En tanto, Tricahue tiene capacidad para 44 pasajeros, un tiempo de carga de 90 minutos y una autonomía de 200 kilómetros.
“Tenemos la convicción de que ambas líneas, las de buses nuevos y reacondicionados, tienen espacio en nuestra empresa. En una carrocería nueva, cero kilómetro, el costo de inversión es mayor; en cambio, el de economía circular, de un bus que era diésel, podría reducir en 40-45% el costo de inversión”.
Con Queltehue, Reborn ha realizado una gira del norte al sur del país, buscando dar a conocer sus atributos. Iquique, Antofagasta, Copiapó, Coquimbo, Valparaíso, Santiago, Rancagua, Concepción, Temuco y Valdivia fueron algunas de las ciudades visitadas. Se hicieron recorridos urbanos, pruebas con empresas industriales y mineras para mostrar la capacidad del vehículo en distintas partes”, cuenta Repenning. En Valparaíso, singularmente, el vehículo se adaptó a las complejas condiciones geográficas de la ciudad y pudo circular sin problemas por los cerros porteños. “Aunque estamos 100% en minería con esta flota, la idea es que sea una alternativa de transporte público o privado. Como el vehículo viene del mundo minero industrial, se adapta al trabajo en estas topografías complicadas”, añade el COO de Reborn.
En lo que respecta a los buses usados reacondicionados como eléctricos, Reborn mantiene algunos de ellos en las faenas mineras, pero el foco está centrado en ser utilizados como parte del transporte público o privado. En función de ello, deben esperar la normativa del Ministerio de Transportes para poder actualizar los protocolos de seguridad y comodidad para los pasajeros, y de ese modo circular por las calles. “Cuando el Ministerio finalice el proceso de normativas, probablemente va a haber mucho interés y ahí vamos a saber cuál es el mercado que hay que abarcar”, asegura Repenning.
Desde que están operativos como Reborn, cita el ejecutivo de la empresa, han logrado evitar la emisión de entre 3.000 y 3.500 toneladas de CO2 equivalente al medio ambiente, equivalente a plantar un bosque similar a 3 o 4 veces la superficie del Estadio El Teniente de Rancagua.
“Respecto de nuestra participación hace dos años en la COP, vamos con una marca mucho más consolidada y mostraremos los buenos resultados con la flota de Queltehue y Tricahue, abrir caminos para exportar nuestras soluciones chilenas y analizar alternativas de financiamiento flexibles y acordes para que los vehículos puedan ser comprados por otras personas de más regiones de Chile”.
El desafío de Reborn en la COP28
La otra buena noticia para Reborn vino de la mano con una invitación que le hizo ProChile a participar de la COP28 de Dubai que se inició ayer en esa ciudad emiratí y que ya cuenta con un acuerdo relevante en que Chile jugó un papel clave: poner en marcha el Fondo para Pérdidas y Daños. Reborn conforma el grupo de 15 empresas chilenas invitadas a la cumbre climática. Ya habían expuesto sobre su modelo de negocios sostenible en la COP26 del año 2021, en Glasgow, Escocia, pero esta vez, dice Repenning, cuentan con un modelo mucho más fortalecido.
“Respecto de nuestra participación hace dos años en la COP, vamos con una marca mucho más consolidada y mostraremos los buenos resultados con la flota de Queltehue y Tricahue, abrir caminos para exportar nuestras soluciones chilenas y analizar alternativas de financiamiento flexibles y acordes para que los vehículos puedan ser comprados por otras personas de más regiones de Chile”, cuenta el COO de la firma.
Aunque en apariencia es paradójico que la COP28 tenga como anfitrión al corazón petrolero del mundo, Repenning cree que “puede ser una señal potente para que los países que producen petróleo vean que el futuro va en otra dirección. Hay mucha gente que está convencida de que hay que cambiar la forma de consumo de nuestro mundo desde el punto de vista de la energía, y lo que podamos hacer las empresas para esta migración es clave, porque ya estamos atrasados respecto de las acciones climáticas. Todo lo que pueda aportar en esa dirección es bienvenido”.