“Muy probablemente pronto empezaremos a ver cubiertas verdes en los edificios de Santiago”. El pronóstico de Paz Serra, jefa de División de Desarrollo Urbano del Ministerio de Vivienda (Minvu), puede hacerse realidad en pocos meses luego que Contraloría aprobó una modificación de la Ordenanza General de Urbanismo y Construcciones (OGUC) para fomentar la construcción de los llamados techos verdes.
Hasta ahora, solo se permitía la utilización de un 20% de la superficie de los techos, espacio que normalmente era aprovechado para la instalación de antenas y de maquinaria propia de los edificios.
La modificación impulsada por el Minvu, y publicada a fines de febrero en el Diario Oficial con entrada en vigencia inmediata, permite la ocupación del 100% de las azoteas de edificios, e indica además que un 75% del espacio podrá ser destinado a vegetación, paneles solares y terrazas. Otras construcciones, como quinchos y baños, no podrán superar el 25% restante.
En el decreto, se señala que esta modificación “apunta a constituir verdaderas áreas verdes, que permitan la implementación en ellas de jardines, huertos urbanos, o bien áreas de esparcimiento” que proporcionen un espacio de descanso a habitantes y usuarios de los edificios, “constituyendo así un pulmón verde que contribuye a mejorar el medio ambiente, y un aporte urbano a la ciudad”.
Al mismo tiempo, agrega el decreto, con el impulso a los techos verdes “se desea fomentar el uso de tecnologías renovables no contaminantes, permitiendo un mayor porcentaje de ocupación de paneles solares en la parte superior de los edificios”.
La primera motivación para realizar este cambios al decreto, explica Paz Serra, fueron las numerosas cartas que recibieron en el MOP y reclamos de particulares, personas jurídicas e instituciones que pedían tener cubiertas que permitan estos denominados techos verdes. O simplemente para poder utilizar la totalidad de la azotea como terraza.