Pilar Valenzuela estuvo recorriendo a fines de enero una zona donde hay más de 300 glaciares, unas 430 especies de flora, unas 135 de fauna, 32 cumbres sobre cinco mil metros y donde está la que es quizá la cascada más grande de Chile. No estuvo en la Patagonia ni en otro país, sino en el Cajón del Maipo, a pocos kilómetros del centro de Santiago, en la Región Metropolitana.
Se trata del territorio compuesto por dos predios en los valles de los ríos Olivares y Colorado, cuyo ingreso está por el Alfalfal a 28 kilómetros de la plaza de San José de Maipo. Hace casi dos años, a fines de marzo de 2019, el Ejército restituyó a Bienes Nacionales las 70 hectáreas del fundo Río Colorado, colindante con el predio fiscal Río Olivares, sumando en poder del Estado 142 mil hectáreas (casi el doble del tamaño del Gran Santiago).
Ese hito abrió la puerta para concretar una idea que tiene al menos una década: hacer de ese territorio un área protegida que pueda ser un Parque Nacional al que puedan acceder con facilidad millones de chilenos y extranjeros. Fue así como nació la campaña Queremos Parque, impulsada por Fundación Plantae, Acceso PanAm y ONG Regenera, y de la cual Pilar Valenzuela es coordinadora. Su objetivo es que el gobierno declare como área protegida la totalidad de esas 142 mil hectáreas que, entre otros atributos, contiene el 50% de la reserva de agua de la cuenca de Santiago y alberga a animales como el cóndor y el guanaco, además de especies en peligro de extinción.
La última visita que Valenzuela realizó al sector, hace pocos días, tuvo como finalidad filmar las bellezas de la zona para generar material audiovisual para la campaña. “Es espectacular, es precioso, mientras más lo conozco, más hermoso lo encuentro. Pocas personas lo conocen porque hay que pedir unos permisos difíciles de conseguir para ingresar; por eso queremos que sea un parque, para que todos puedan disfrutarlo”, comenta Valenzuela.
¿Qué pasó con el petitorio y las 142 mil firmas de apoyo que entregaron en La Moneda en junio de 2019?, ¿tuvieron respuesta?
Hubo una respuesta muy formal de la presidencia, donde nos decían que viéramos el tema con los ministerios de Medio Ambiente y de Bienes Nacionales, así que solicitamos reuniones con los ministros. En el caso de Bienes Nacionales, nos entrevistamos con el ministro Felipe Ward y después con el ministro Julio Isamit, poco después que este asumiera. Les planteamos nuestras inquietudes y les entregamos información, pero eso fue todo. Sabemos que son decisiones complejas, pero al menos nos escucharon.
En cambio, en el caso de Medio Ambiente, hemos hecho al menos cuatro intentos formales pero la ministra Carolina Schmidt no nos ha recibido; nos derivó con el jefe de Recursos Naturales y Biodiversidad, Juan José Donoso, y con él nos reunimos, pero este tipo de decisiones no las toma un cargo intermedio. Nos parece impresentable que la ministra de Medio Ambiente no quiera ni siquiera sentarse a dialogar, mientras que una empresa como Anglo American es la que tiene más lobby en Chile y todas las autoridades la reciben; eso me indigna.