El detalle de los grandes temas del proyecto SBAP que se zanjarán en Comisión Mixta
Tres de los nueve artículos en que no hubo acuerdo entre ambas cámaras fueron aprobados este lunes. Los seis artículos que falta por aprobar -que incluyen temas relativos a la zona de amortiguación, organismos genéticamente modificados y, los más controversiales, sitios prioritarios y concesiones sectoriales- serán discutidos en las próximas sesiones. Los integrantes de la Mixta esperan despachar -por fin- el proyecto durante este mes de mayo.
Este lunes 15 de mayo arrancó la segunda sesión de la Comisión Mixta que resolverá todos aquellos artículos en que no hubo acuerdo entre la Cámara de Diputados y el Senado respecto del proyecto de ley que crea el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP), aprobado en tercer trámite el pasado 26 de abril.
El proyecto de ley con las modificaciones introducidas por la Cámara de Diputados logró pasar a tercer trámite constitucional, excepto nueve artículos (siete permanentes y dos transitorios) ya que el Senado rechazó dichos cambios. El 11 de mayo, día en que se constituyó la Comisión Mixta bajo la presidencia del senador Juan Ignacio Latorre, se acordó discutir primeramente aquel articulado menos complejo de solucionar, para luego entrar de lleno al abordaje de los temas más controversiales.
Sin embargo, el primer tema a tratar no estuvo exento de dificultades el pasado lunes 15. Con la presencia de la ministra de Medio Ambiente, Maisa Rojas, la sesión abordó la modificación del inciso tercero del artículo 12° transitorio -defendida por el Ejecutivo- que consideraba la experiencia de los funcionarios del Medio Ambiente especialistas en materias de biodiversidad a la hora de postular a los concursos públicos de ingreso al SBAP, fuera de las y los trabajadores que serán traspasados desde el mismo MMA y la CONAF.
Esto suscitó un reñido debate al interior de la Comisión Mixta, ya que el senador Sergio Gahona y el diputado José Carlos Meza acusaron una “discriminación” de parte del Ejecutivo a aquellos expertos en biodiversidad que no necesariamente están en el MMA ni en el sector público, como en universidades privadas e institutos independientes. Los diputados Daniel Melo y Félix González defendieron el punto, sosteniendo que “acá no hay ninguna discriminación”, y que lo que busca la norma es justamente apreciar y valorar esa experiencia acumulada en temas de biodiversidad. Ambos dijeron además que esta indicación -aprobada por la Cámara pero rechazada por unanimidad en el Senado- había sido discutida y aprobada por la ministra del Medio Ambiente del gobierno de Sebastián Piñera.
Sin embargo, al haber posturas divergentes respecto de este tema, la ministra Rojas se abrió a modificar la propuesta del Ejecutivo y eliminó las palabras “en el sector público” para así considerar a todo el espectro de especialistas que puedan participar de los concursos públicos para trabajar en el futuro SBAP. Al final, el inciso del artículo 12° transitorio que se sometió a votación consideró “la experiencia laboral en materia de biodiversidad” a la hora de postular a los concursos públicos. El artículo se aprobó por 9 votos a favor y uno en contra del diputado Daniel Melo.
El siguiente artículo que se votó fue mucho más expedito. Se trata de los artículos 145° y 147° permanente, donde la propuesta del Ejecutivo fue mantener la norma de traspasar del MMA y la Superintendencia de Medio Ambiente (SBA) al SBAP la tarea de dictar y fiscalizar, respectivamente, los Planes RECOGE (recuperación, conservación y gestión de especies). La ministra Rojas apeló a mantener la fiscalización de los Planes de Manejo para la Conservación de Recursos Naturales, considerados en el artículo 42 de la Ley de Bases del Medio Ambiente, en manos de la SMA.
“Tenemos un debate interesante en cuanto a los planteamientos. Se ha dejado ver con total claridad quienes están a favor de los intereses de la gran industria por sobre el interés superior de la nación: generar una institucionalidad pública que resguarde la conservación”.
La votación que viene
Mañana jueves, entre las 10.00 y las 12.00 horas, la Comisión Mixta por el SBAP retomará la discusión de los seis artículos siguientes, agrupados en cuatro grandes temas: organismos genéticamente modificados, definición de zona de amortiguación, regulaciones de sitios prioritarios y concesiones sectoriales. Y también se prevé un debate encendido, sobre todo por cómo cerró la sesión del lunes, en que la ministra Maisa Rojas propuso la eliminación del artículo 107, aprobado por la Cámara pero rechazado por el Senado, que declaraba a las áreas protegidas libres de organismos genéticamente modificados.
La titular de Medio Ambiente argumentó que es un tema que aún no se aborda con la seriedad que corresponde a nivel país, por lo que el artículo sería inaplicable. Prueba de ello, Rojas citó que Chile es parte de la Convención de Diversidad Biológica, cuyos Protocolos de Nagoya y Cartagena en la materia no han sido ratificados por nuestro país. El diputado Juan Antonio Coloma, en principio, se mostró a favor de la postura de la ministra, pero el diputado Félix González se opuso tenazmente a la propuesta.
González aseguró que las especies genéticamente modificadas polinizan a otras especies naturales y generan problemas serios de pérdida de biodiversidad, por lo que sugirió mantener el artículo ya que hay “un riesgo serio”. Como sea, el artículo 107 será el primero que se pondrá en tabla a partir de mañana.
Al respecto, González señaló a País Circular que “vamos a hacer una propuesta para organismos genéticamente modificados, para que no se puedan reproducir ni para semilla ni para consumo, dentro de las áreas protegidas”.
Respecto del debate que viene, el también diputado integrante de la Comisión Mixta, Jaime Sáez, quien declaró a este medio que “el nivel de discrepancia es menor, por lo que el futuro del SBAP es halagüeño. En el tema de de sitios prioritarios, de organismos genéticamente modificados y de concesiones sectoriales estamos trabajando para encontrar concordancia. Sin embargo, la aprobación del SBAP no puede ser a cualquier costo. Por eso, es tan importante garantizar que el proyecto esté en línea con la protección de la biodiversidad y no alineado con el interés industrial”.
Otro tópico que se revisará en las sesiones sucesivas será el Número 34 (que pasó a ser 33 luego de pasar por el Senado) que define el concepto de “zona de amortiguación”. La Cámara de Diputados, en segundo trámite constitucional, modificó la definición emanada del Senado en primer trámite constitucional y lo dejó así: “Espacio ubicado en torno a un área protegida, cuyo uso podría ser parcialmente restringido en virtud de lo que establezcan los instrumentos de ordenamiento territorial pertinentes, destinado a absorber potenciales impactos negativos y fomentar efectos positivos de actividades para la conservación de tal área”. Algunos senadores argumentaron posteriormente que esta definición podía vulnerar el derecho de propiedad y se votó en contra.
Con respecto a sitios prioritarios, son dos los artículos en controversia: el artículo 29° permanente y el 8° transitorio. Cinco incisos del primero fueron rechazados por el Senado y se votarán en la Comisión Mixta. El meollo del asunto refiere al término “cambios significativos” en el tema de acciones que constituyan infracciones en sitios prioritarios (fuera de las áreas protegidas). La recomendación del Ejecutivo es especificar de mejor forma a qué refieren “los cambios significativos en las características ecológicas del sitio” que darán lugar a infracciones. En particular, esta norma encontró oposición en algunos senadores porque eventualmente prohibiría la extracción del musgo pompón que sirve como economía de subsistencia para algunas comunidades.
Sobre el artículo 8° transitorio, la ministra Rojas recomendó mantener tal cual la modificación de la Cámara de Diputados que reconoce a los sitios prioritarios no solo de la Estrategia Nacional de Biodiversidad, sino también a los de las Estrategias Regionales de Biodiversidad.
“Tenemos un debate interesante en cuanto a los planteamientos. Se ha dejado ver con total claridad quienes están a favor de los intereses de la gran industria por sobre el interés superior de la nación, que es generar una institucionalidad pública que resguarde la conservación”, especifica el diputado Jaime Sáez.
“Este proyecto es bueno, el movimiento ambiental está esperando que exista un servicio que proteja estas zonas, pero no podemos generar todo un servicio de áreas protegidas, y luego meterle mineras o salmoneras. No tiene ningún sentido que exista un servicio para lugares que van a quedar alterados por proyectos extractivos”.
El tema más polémico: concesiones sectoriales
Sobre el tema más árido en debatir, el de las concesiones sectoriales en áreas protegidas, hay dos artículos en disputa: el 93° y el 149°. Aprobado el artículo 92 que autoriza concesiones sectoriales con fines distintos a investigación, educación y turismo a funcionar “con sus leyes respectivas”. Con respecto al artículo 93 que se verá en Comisión Mixta, el Ejecutivo ha propuesto modificarlo “para prohibir las concesiones sectoriales para las actividades de recursos naturales con fines comerciales, en las tres categorías más estrictas del sistema”. En otras palabras, no se tocarían las concesiones sectoriales con anterioridad a la declaración de áreas protegidas.
En el artículo 149°, en tanto, el Gobierno propone corregirlo, incorporando un segundo inciso que excluya actividades de cultivos de especies hidrobiológicas exóticas en todas las categorías de áreas protegidas.
“Vemos que este proyecto es bueno, el movimiento ambiental está esperando que exista un servicio que proteja estas zonas, pero no podemos generar todo un servicio de áreas protegidas, y luego meterle mineras o salmoneras. No tiene ningún sentido que exista un servicio para lugares que van a quedar alterados por proyectos extractivos. En esta comisión se elaborará la propuesta que finalmente se votará en ambas salas, esperando que se corrija. No queremos concesiones”, relata el diputado Félix González.
Sobre el segundo punto de las especies exóticas cultivables, el parlamentario ecologista cree que es necesario también prohibir la acuicultura intensiva de especies endémicas. “Acá en el Biobío tuvimos la amenaza de varias concesiones acuícolas, como por ejemplo del róbalo, que es una especie nativa, pero al tener una reproducción idéntica a las salmoneras, con jaulas, con fecas de los peces, hacinamiento, mortandad, escape, pinturas antiadherentes, significa igualmente una alteración muy negativa de los ecosistemas. La pelea la tenemos que dar y no ir solo a puntos intermedios para sacar un proyecto en la medida de lo posible”, cierra González.