Comisión de Medio Ambiente llega al “corazón” del proyecto de Ley Marco de Cambio Climático
Durante la semana pasada se llevaron a cabo dos sesiones que continuaron la tramitación del proyecto de ley marco de cambio climático, esto en la comisión de Medio Ambiente del Senado. En dichas instancias, se terminó por despachar el Tomo I del Comparado, pasando al Tomo II que ha sido calificado como una de las áreas centrales de la iniciativa, sobretodo su primera parte que alude a los instrumentos de Gestión de Cambio Climático, a saber: NDC y Estrategia Climática a Largo Plazo, esta última descrita por la Ministra Carolina Schmidt como la “columna vertebral” de la propuesta legislativa. Con todo, el CR2, entidad que ha estado trabajando conjuntamente con la comisión realizó una exposición respecto de estos dos instrumentos, derivándose debates para adelantar la fecha última de carbono neutralidad (año 2050) y una discusión respecto a las talas rasas del sector forestal y sus consecuencias negativas para la captura de emisiones de CO2.
La semana pasada la Comisión de Medio Ambiente y Bienes Nacionales del Senado terminó la votación en particular del Tomo I del Comparado respecto del proyecto de ley Marco de Cambio Climático, texto que estaba centrado, fundamentalmente, en la definición de las nociones básicas que tratará la iniciativa. Ahora, los parlamentarios entraron al estudio y votación de las indicaciones pertenecientes al Tomo II del Comparado, documento que según se ha consignado durante las sesiones legislativas, representa el “corazón” de la propuesta.
En específico, el Tomo II aborda las indicaciones desde la número 157 a la 459, comienza con el Título II “Instrumentos de Gestión del Cambio Climático” con el Párrafo I “De la Meta de Mitigación”. Más en concreto aún: durante la comisión se han tratado esencialmente los dos primeros artículos, el Artículo 4º Meta de Mitigación que establece la meta de carbono neutralidad al año 2050, y el Artículo 5º Estrategia Climática de Largo Plazo, la que determina los lineamientos a contemplar durante los próximos 30 años. Ambos puntos han sido objeto de extensas discusiones y de un amplio análisis al interior de la Comisión.
“En nuestra opinión lo que viene ahora en el Tomo II, y en esta primera parte, es el corazón del proyecto de ley; por lo tanto, es crítico que los distintos instrumentos tengan una coherencia entre ellos para lograr el objetivo último de la ley, que es la carbono neutralidad. Y por eso nos vamos a concentrar por ahora en la NDC y la Estrategia Climática de Largo Plazo”, dijo la ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt, antes de entrar de lleno en materia legislativa.
CR2: Foco en limitar aumento de temperatura
El Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR2) ha sido una de las entidades que ha trabajado conjuntamente con la comisión durante toda la tramitación de este proyecto de ley. En este sentido, la institución abrió el debate en torno al Tomo II del Comparado realizando una exposición relativa a los artículos 4º y 5º que implican las indicaciones desde la número 157 a la 264.
Ésta estuvo enfocada primero en detallar y recordar los objetivos del Acuerdo de París, haciendo énfasis en la idea de limitar el aumento de temperatura en 2ºC a fines de siglo, y aspirar a que no se alce más de 1,5ºC respeto de los niveles preindustriales. Luego de esto, el CR2 explicó el concepto de Presupuesto de Carbono: “Son las emisiones totales que el planeta puede permitirse emitir al año 2050. Así, el año 2030 aparece como uno importante pues es una meta intermedia, que es justamente en la que aparece en la NDCs, las que para alcanzar el cero de emisiones van aumentando progresivamente”, explicaron desde la entidad.
“La tendencia del país, -continúa el CR2-, es que nuestras emisiones están aumentando y por lo tanto, y esto también es fuente del Ministerio de Medio Ambiente y del Comité Científico, nosotros estamos en un momento todavía con emisiones al alza y nuestra economía también. Lo que dice la NDC es que al 2050 queremos ser carbono neutrales, pero está definido que el año 2025 va a ser nuestro año peak de emisiones y que el presupuesto de carbono es de 1.100 millones de toneladas de CO2 equivalentes”.
Posteriormente, el CR2 pasó a explicar el concepto de “Contribuciones Nacionalmente Determinadas bajo el Acuerdo de París” (NDC), las que representan los esfuerzos de cada país para reducir las emisiones nacionales y adaptarse a los efectos del cambio climático. Por otro lado, además de las NDC este proyecto de ley también contempla la Estrategia Climática de Largo Plazo (2050), la que ha permitido elaborar presupuestos sectoriales 2020-2030: “Esto plantea el cómo logramos el presupuesto nacional de emisiones, esta torta de emisiones cómo la repartimos por los sectores en Chile”.
Al mismo tiempo, la Estrategia permite articular los niveles de absorción y almacenamiento para alcanzar y mantener la carbono neutralidad, estableciendo mecanismos de integración entre políticas nacionales, sectoriales y regionales, además de criterios de monitoreo, reporte y verificación. Por último, la estrategia se actualiza cada 10 años y con un mecanismo abreviado cada 5 años, “porque la idea es que converse con la NDC, que se actualiza cada 5 años”.
Votación y discusión parlamentaria
El meollo del debate surgido al interior de la comisión estuvo marcado por la posibilidad de apresurar el proceso de neutralidad de emisiones, es decir, de adelantar la fecha 2050. Por ejemplo, en esta postura, la senadora Ximena Órdenes manifestó: “Yo coincido que aquí está el corazón, pero quiero insistir y hacer la pregunta: yo entiendo que la información disponible científica, pone como horizonte el 2050, sin embargo, por qué no podemos ser más ambiciosos, por qué no adelantar el proceso. No me logro convencer”.
En una misma línea crítica se presentó el presidente de la comisión, Senador Alfonso De Urresti: “Si no fuera por correr los límites, tendríamos HidroAysén. Se trata un poco de exigir cambios más veloces. La energía eólica y fotovoltaica nos decían que carísimo, hoy día vemos todas las semanas que las mayores inversiones se hacen en energía y hay una convergencia brutal para acelerar este tránsito. Por eso, ¿no podemos ser más ambiciosos ni poder una norma más exigente como país? Acá se juegan intereses también. Las grandes empresas que manejan los combustibles fósiles quieren hacer su retiro-ganancia. Quiero provocar una discusión siendo responsable”, terminó por comentar el parlamentario.
La contraargumentación vino desde la ministra Schmidt, autoridad que señaló: “Esta discusión va en la relevancia de contar con el proyecto de ley marco de Cambio Climático, el que establece obligaciones. Creemos que es muy importante hacerlo, porque hoy día no tenemos ningún instrumento vinculante que establezca la obligatoriedad de las metas de los distintos sectores. También, más allá de los distintos sectores, el consenso está en la ciencia y que eso es la guía para hacer la transición. La fecha está basada en la ciencia y nos permite tener un instrumento vinculante para alcanzar; son pocos los países que permiten establecer un proyecto de ley para alcanzar la carbono neutralidad”.
“Reiterar -prosigue la ministra-, un tema que es muy relevante que es entender que en la carbono neutralidad los presupuestos son móviles, lo que no es móvil es que tenemos que ser neutrales al 2050. Por eso la ley marco establece estos instrumentos que son vinculantes y por eso la flexibilidad, porque vamos a tener que aumentar los presupuestos de mitigación si es que las temáticas de captura no se dan para conseguir siempre la meta de carbono neutralidad. La fecha no es negociable, sí la flexibilidad de los instrumentos para asegurarla.
Con todo, en la sesión del 12 de enero comenzó la votación del articulado, específicamente del Art.5 Estrategia Climática de Largo Plazo, esto a raíz de una solicitud efectuada por la Ministra Carolina Schmidt que da cuenta que este apartado representa la “columna vertebral” del proyecto de ley. Así, se lograron aprobar varios aspectos.
Por ejemplo, la definición de Estrategia Climática de Largo Plazo en su primer inciso, donde los cambios más importantes radican en el reconocimiento expreso del Acuerdo de París y dejando pendiente la frase el “considerando un horizonte a 30 años”, esto en virtud del debate anteriormente comentado.
También, se logró zanjar la letra a) de este artículo “Presupuesto Nacional de Emisiones de Gases de ciclo invernadero al año 2030 y 2050”, esto gracias a una definición de consenso efectuada por la mesa técnica que logró subsumir desde la indicación 174 a la 179, y que estará determinado por la NDC y la fecha de esta artículo 4º, el que además será actualizado el año 2040 con la Estrategia Climática de Largo Plazo.
Sin embargo, al llegar a la letra c) del Art.4, “Niveles de Absorción de Gases de Efecto invernadero para alcanzar y mantener la meta del artículo 4”, se produjo nuevamente un debate, esta vez respecto de las consecuencias negativas que puede traer para la absorción de emisiones el periodo de cosecha o de tala rasa.
El presidente de la comisión, Senador Alfonso De Urresti, no dejó espacio a dudas en esto: “Cuando nosotros establecemos niveles de absorción y almacenamiento, hay que incorporar el elemento cosecha. Es la discusión que hemos dado en el proyecto de ley que somete al SEIA los proyectos forestales. Cuando estos bosques son esencialmente cosechables, con una alta rotación producto de la velocidad de crecimiento, esos inventarios de captura de carbono cómo se contabilizan. Pasan 1 o dos años de superficies descubiertas, y según entiendo, no hay contabilidad de ese periodo de talas rasas en las plantaciones artificiales”.
La respuesta vino de la jefa Oficina Cambio Climático del MMA, Carolina Urmeneta, quien explicó que: “Chile al igual que muchos países tiene que seguir las guías del panel intergubernamental de cambio climático para presentar su inventario de emisiones de gases de efecto invernadero. Esas guías incluyen todas las fórmulas de cálculo para todos los sectores, incluido el sector forestal y ahí se establece con claridad cómo se determinan las capturas y emisiones. El sector forestal cada vez que realiza una cosecha, se emiten esas capturas. Por lo tanto, cuando se cosecha un pino o eucaliptus se considera que todo lo que había capturado se emite. Luego de esto, se hacen los informes bianuales, donde posteriormente se nos somete a una especie de auditoria de la convención marco donde se nos hacen consultas respecto de estas cifras”.
Con todo, los parlamentarios señalaron que necesitan mayor información respecto de los porcentajes de forestación y reforestación que se va a hacer en bosque nativo, con sus respectivas metas y lo que se llevará adelante en materia de absorción, para lo cual se tanteó la idea de invitar a alguna autoridad de CONAF.