Teladevuelvo convierte textiles en desuso en piezas artísticas y educativas
Nacido en la Región de Valparaíso, este emprendimiento de la ingeniera Karem Pérez y la psicóloga Pamela Pacheco propone la confección de mobiliario con relleno de ropa en desuso y habilitación de espacios para clubes de lectura y bibliotecas, y la realización de experiencias textiles ligadas al plano artístico. En el primer caso, ellas les piden a las organizaciones donar sus residuos de textiles a cambio de la entrega de productos valorizados con este material.
Teladevuelvo es un juego de palabras: “tela” por el material con que trabajan en este proyecto las emprendedoras Karem Pérez y Pamela Pacheco; y “te la devuelvo” porque, de cierto modo, ellas se proponen devolver a sus potenciales aliados productos hechos con los mismos residuos textiles que ellos donan. El otro sentido de la palabra elegida radica en que la firma devuelve a las comunidades productos valorizados con material que ha sido desechado.
Ingeniera en construcción de profesión, Karem Pérez inició este emprendimiento inspirada en “buscar una alternativa para la revalorización de residuos textiles”, según comenta. “Una tiene mucha ropa en los clóset y siempre estuvo en mi mente qué hacer con esa ropa que no se la puedes heredar a nadie, con los uniformes que nadie más ocupa, qué hacer con los calcetines rotos”, agrega.
Al ver desde la distancia el desierto de Atacama cubierto de ropa en desuso, Teladevuelvo partió con la idea de recibir ropa, restaurarla y recircularla. Pero después decidió dejar de recibir ropa, por la gran cantidad acumulada, y se focalizó en comprar máquinas de trituración para que esa ropa en mal estado sirviera de relleno para nuevos productos.
Karem ya llevaba un camino recorrido cuando conoció en 2024 -en el programa Valparaíso Stempower del Instituto Internacional para la Innovación Empresarial (3IE) de la Universidad Técnica Federico Santa María (USM)- a la que sería su futura socia en el proyecto: la psicóloga Pamela Pacheco.
Gracias al encuentro en este programa -que apoya a mujeres de la Región de Valparaíso con ideas de negocios basadas en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, previo a la formalización de sus empresas- lograron hacer match y encadenar lo que a ambas les apasionaba: el amor por el reciclaje y el cuidado del planeta junto con la literatura, el fomento lector y las artes en general. Ahora, juntas se describen como “mujeres que transformamos textiles en desuso en piezas de diseño arquitectónico, artísticas y educativas, impulsando la economía circular y su valorización”.
“Karem tiene más años en esta búsqueda. Teladevuelvo es una marca que ella inicia y en este encuentro de la USM de ideas que puedan ser sostenibles y científicas, nos conocimos. Yo tenía un proyecto de sustentabilidad y lectura, y así fue como hicimos match entre nuestros intereses”, describe Pamela Pacheco.
Actualmente, Pamela coordina dos clubes de lectura en la Región de Valparaíso: uno orientado al público infantil y otro de mujeres. Así también, es parte de las redes de clubes de lectura de la región, y está vinculada con el Ministerio de las Culturas para su labor. Había, por tanto, una movida cultural literaria que requería un complemento con lo que es el reciclaje textil: ahí surgió la idea de generar mobiliario lector, a partir de la confección de unos puff con relleno de textiles, y que tenían unos bolsillos para guardar libros.
“Fuimos al Colegio Alemán de Viña. Ellos están prontos a desechar una buena cantidad de uniformes. Queremos trabajar con ropa de clóset, pero también con esas prendas institucionales que no tienen mayor uso. Trituramos ropa, rellenamos unos puff e instalamos el primer espacio para el mes de la lectura en ese establecimientos”, complementa Karen Pérez, cuya marca dio inicio ahí a una de las líneas elementales de la propuesta: Teladevuelvo Leyendo, referido a mobiliarios de lectura para escuelas y bibliotecas.
“Hemos levantado propuestas al Fondo del Libro y hemos tenido conversaciones con el Club Alemán de Valparaíso para ambientar un espacio de un club de literatura. En el nuevo espacio Destino Valparaíso hemos tenido acercamientos para puntos lectores”.

El modelo funciona en sentido contrario a lo que ocurre con el reciclaje textil, que suele partir con la recolección y recepción de ropa. Aquí no. Se vende el producto hecho a partir de residuos textiles y luego se hace una equivalencia en kilos que la organización debe entregarle a Teladevuelvo. “El producto que la empresa u organización compra tiene una equivalencia en textiles, y eso es lo que recibimos como ropa de la organización, y así aplicamos la economía circular”, apunta Karem. Otro proyecto dentro de Teladevuelvo es el arriendo de este mobiliario lector como espacio para conversatorios, mediaciones, ferias y otros relacionados.
El diseño de habilitación de espacios para fines culturales, educativos y creativos también se compone de una propuesta de revestimientos hechos con reciclaje textil. Si bien aún no hay acuerdos con alguna empresa para un proyecto con revestimientos, la idea es que “la organización sueñe con el espacio y que se genere un diseño flexible que ellos quieran implementar y nosotros aplicar nuestros revestimientos”. Se pueden hacer todo tipo de figuras con estos revestimientos para embellecer esos espacios de lecturas, y puede ser adaptado a la identidad gráfica de cada organización. Lo que se busca, en el fondo, es fomentar la “sostenibilidad corporativa”, dice Pamela Pacheco.
Según relata la psicóloga, “hemos levantado propuestas al Fondo del Libro y hemos tenido conversaciones con el Club Alemán de Valparaíso para ambientar un espacio de un club de literatura”. En el nuevo espacio Destino Valparaíso hemos tenido acercamientos para puntos lectores. También con la Troleteca, un hermoso proyecto comunitario en el Cerro Playa Ancha, y en la Biblioteca Municipal de Viña del Mar.
Ambas emprendedoras cuentan con un pequeño taller en el sector Recreo, de Viña, y ahí disponen de una máquina trituradora industrial con la que logran fabricar los productos ofrecidos. “Karem tenía al principio una máquina pequeña, hicimos varios experimentos, procesos mecánicos, hasta lograr un producto elaborado como solución”, apunta Pamela.
Teladevuelvo, en tanto, pertenece a la red de recuperación textil de la Región de Valparaíso. “Sabemos que la única forma de abordar el textil no es la trituración, pero sabemos que hay toda una movida de las artes, de las arpilleras, que hacen otro tipo de valorización textil. Nosotras queremos ser un actor dentro de una comunidad que quiere resolver el tema de los residuos textiles”, subraya Karem.
“Sabemos que la única forma de abordar el textil no es la trituración, pero sabemos que hay toda una movida de las artes, de las arpilleras, que hacen otro tipo de valorización textil. Nosotros queremos ser un actor dentro de una comunidad que quiere resolver el tema de los residuos textiles”.

Teladevuelvo Enmarcando
La segunda línea de trabajo de Teladevuelvo comprende la realización de talleres de experiencia textil junto a artistas emergentes en diferentes técnicas y artes como la acuarela, el bordado, la cenotipia, el grabado y otras. Con descartes textiles, las emprendedoras crearon marcos que servirán para este tipo de iniciativas. Es lo que en el proyecto se llama Teladevuelvo Enmarcando.
Sin ir más lejos, el próximo 9 de noviembre Teladevuelvo se alista para participar de un taller junto a la cafetería viñamarina Helene & Martin. Consiste en una invitación a ser parte de una iniciativa donde se conjuga el bordado, la sustentabilidad y la posibilidad de disfrutar de un café y pastelería francesa. En dicho taller, las monitoras artistas harán bordados con desechos textiles, y los marcos de los bastidores son proporcionados por Teladevuelvo. “Cuando cortamos el revestimiento, queda este descarte y con él hacemos los marcos. Nuestra idea es ser 0% desecho. Me he vinculado con artistas de la región y nos gusta tener nexos con cafeterías de la zona que tengan una mirada de sustentabilidad como Helene & Martin”, cierra Pamela Pacheco.







