A fines de septiembre, Neuvol cumplió dos años desde la aprobación de su plan de gestión y, por lo tanto, del inicio de sus operaciones como el primer Sistema Colectivo de Gestión (GRANSIC) de neumáticos usados (NU) y neumáticos fuera de uso (NFU) en el marco de la implementación de la Ley REP. Esta fase inicial de puesta en marcha no ha estado exenta de dificultades, señala el gerente general de Neuvol, Rodolfo Poblete, a País Circular.

“Las principales dificultades han estado vinculadas a la capacidad instalada limitada -o inexistente- de valorización en diferentes regiones del país, y a las dificultades logísticas asociadas a la extensión territorial. Estos desafíos nos han impulsado a buscar nuevas soluciones y a generar alianzas estratégicas con diferentes actores para ir desarrollando esfuerzos permanentes en potenciar una red de procesos que permita llegar a regiones donde tradicionalmente no existía gestión en este producto prioritario”, señala Rodolfo Poblete, respecto de los principales obstáculos que ha debido afrontar Neuvol en estos dos años de operación.

Pese a esta situación, Neuvol, sistema encargado de gestionar neumáticos categoría A, vale decir “los que tengan un aro inferior a 57 pulgadas, con excepción de los que tengan un aro igual a 45 pulgadas, 49 pulgadas y 51 pulgadas”, ha conseguido sumar cada vez más socios -empresas reguladas por la ley y el decreto N°8 sobre recolección y valorización de neumáticos- que, según Poblete, “han mostrado un alto nivel de compromiso con el cumplimiento de las metas”. 

Neuvol trabaja con un grupo de gestores de recolección y valorización licitados a través de un sistema digitalizado que asegura la trazabilidad de este producto prioritario. “Nuestro sistema garantiza que cada neumático recolectado sea registrado y gestionado conforme a la normativa, entregando reportes claros y verificables a nuestros socios. Trazamos los procesos de recolección y valorización de nuestros gestores licitados a través de una plataforma que nos permite identificar la totalidad de movimientos de cada lote gestionado con datos de generador, comuna y región. Contamos además con la revisión de transacciones con una auditoría realizada por un auditor externo, que podría detectar oportunidades de mejora en los procesos o en la reportabilidad”, explica Rodolfo Poblete respecto del conjunto de acciones desempeñadas por Neuvol con las empresas afectas a la Ley REP en este particular.

En relación con los modelos de valorización de neumáticos usados y fuera de uso, Neuvol recurre a las capacidades técnicas existentes, distribuidas solamente en algunas regiones del país. El recauchaje es una de estas alternativas, ya que permite extender el ciclo de uso del neumático. Un segundo tipo de proceso “es el reciclaje material que permite recuperar uno o varios de los materiales que componen un neumático, logrando producir gránulos, polvo de caucho, acero y fibra textil”, agrega Rodolfo Poblete.

Una tercera técnica, complementa el gerente general de Neuvol, es la “valorización energética, proceso industrial en el que se utilizan tanto la energía como el material presente en los neumáticos fuera de uso. Se destacan a nivel nacional las plantas de pirólisis, proceso que descompone los neumáticos, obteniendo sus materiales originales mediante calor en ausencia de oxígeno. Con estos métodos es posible obtener aceite pirolítico, negro de humo, acero y gas, útiles para distintos usos industriales”.

Finalmente, Poblete cita una forma de valorización “incipiente”: la exportación de neumáticos que pueden ser procesados, bajo los modelos descritos, en diferentes latitudes del planeta. En atención a la falta de capacidad productiva en el país, el representante de este GRANSIC prevé que esta alternativa “podría transformarse en una potente herramienta para la implementación de la ley”.

Los vacíos y pendientes

Según el decreto publicado en el Diario Oficial en enero de 2021 -cuyas obligaciones empezaron a regir de forma íntegra desde enero de 2023-, los productores de neumáticos “categoría A” deben recolectar al menos el 50% de los neumáticos puestos en el mercado el año anterior en 2025. El próximo año (2026) la meta de recolección aumenta al 80%, y luego al 90% (octavo año). Además, desde el tercer año -este 2025- los Sistemas de Gestión deben cumplir con porcentajes de recolección mínimos por región,

En cuanto a la valorización, el decreto establece que al primer año de vigencia (2023) se debía valorizar el 25% de los neumáticos puestos en el mercado el año anterior; al segundo año (2024) el 30%; al tercer año (el actual 2025) el 35%; al cuarto año (2026) el 60%, hasta cubrir el 90% el octavo año de vigencia (2030).

“El principal desafío sigue siendo la brecha entre las metas determinadas en el decreto N° 8 y la infraestructura disponible en el país para alcanzarlas. Se agrega la descentralización de las soluciones de valorización; el desarrollo y fortalecimiento de la cadena de valor logística y de acopio, y la mejora de la capacidad tecnológica asociada a la trazabilidad de las actividades relacionadas”, comenta el ejecutivo de Neuvol.

Poblete reconoce que la gestión logística “en un país extenso y geográficamente complejo como Chile siempre es un reto”. Por tal razón, agrega, “consideramos que cada región y comuna posee variables que requieren ser incorporadas dentro de este primer ciclo de aprendizaje y que son necesarias de relevar en las siguientes etapas de mejoramiento de la tecnología y el decreto N° 8”. En función de ello, Neuvol ha desarrollado modelos operativos con aproximación específica a cada territorio, contexto y dificultad. En esta misma línea se suman diferentes alianzas estratégicas que ha materializado para desarrollar proyectos con miras a validar las dinámicas operativas y permitir un cumplimiento de metas eficaz y costo-eficiente.

La revisión del decreto [establecida legalmente], a juicio de Neuvol, es imperativa para mejorar el panorama presente y con mayor razón el futuro, ya que “permitirá actualizar a la realidad nacional un proceso que comenzó con la preparación de este documento en diciembre de 2017”. Al respecto, Rodolfo Poblete asegura rotundamente: “Las estimaciones iniciales de desarrollo del mercado de recolección y valorización necesitan una profunda actualización a nivel nacional y para cada una de las regiones en específico”.

Más aún, añade, “evaluamos que en el corto y mediano plazo la capacidad instalada no crecerá al ritmo de las metas”. Arguye esto porque “se debe considerar que los proyectos tardan -desde su revisión inicial hasta su implementación- un tiempo aproximado de 3 a 5 años, en el mejor de los casos”.

Desde su visión, Poblete detecta que “aunque el reciclaje de neumáticos se ha desarrollado significativamente en las últimas dos décadas en el país, en estos primeros años de operación no hemos tenido avances mayúsculos ni en tecnología ni volumen de procesamiento”. Insiste por ello en que cobra un carácter indispensable “la innovación y la inversión en nuevos métodos para lograr el adecuado cumplimiento de las metas regionales, que ascienden rápidamente desde 2026”. 

Esta señal de alerta es parte de lo que Rodolfo Poblete transmitió en su participación como representante de Neuvol en la tercera edición del Foro REP, encuentro organizado por País Circular y que la semana pasada reunió a todo el ecosistema de la normativa rectora del reciclaje en el país. Durante el encuentro, Poblete fue parte del panel “Radiografía a los sistemas de gestión. Metas, obligaciones y despliegue territorial”, que fue moderado por Soledad Valiente, subdirectora de Iniciativas Corporativas Corfo, y donde compartió experiencias y reflexiones con Nathalia Silva, gerenta general de Valora Más; María José Ureta, gerenta de Economía Circular de GIRO; y Natalia Yankovic, vicepresidenta de ReSimple.

Al gerente general del sistema colectivo de gestión de neumáticos Neuvol le inquieta el aumento progresivo de las metas de recolección a partir del próximo año. “Nuestra participación en el Foro REP tuvo un foco claro: relevar la importancia de aumentar y mejorar las capacidades productivas y logísticas para el cumplimiento de las metas, de manera descentralizada y urgente. Claramente el país se encontraba menos preparado de lo esperado para enfrentar los objetivos manifestados en el decreto N°8 para los tres primeros años y este escenario solo puede complejizarse a partir del próximo año, donde los cumplimientos suben de un 50% a un 80% en la meta de recolección”, subrayó Poblete.