Morgan: el desafío de valorizar los neumáticos Categoría B para cumplir las metas de la Ley REP
Dueño de una vasta experiencia en la gestión integral de neumáticos fuera de uso (NFU), Morgan es un aliado estratégico de los Sistemas de Gestión colectivos y de los consumidores industriales para el cumplimiento de la normativa. Su gerente general, Jorge Rodríguez, si bien valora el compromiso de los actores, percibe una dificultad dentro del proceso de valorización de los neumáticos Categoría B -los de mayores dimensiones- cuyas metas aumentarán desde un 25% a un 75% en 2027. Morgan será una de las empresas que expondrá en el próximo Foro REP, programado para el los días 14, 15 y 16 de octubre en el Hotel Marriott de Santiago.
Morgan es una empresa que presta un servicio integral de gestión de los neumáticos fuera de uso (NFU), tanto los que la ley define como de Categoría A como aquellos de Categoría B. Con más de 50 años en el rubro, Morgan partió con el recauchaje de todo tipo de neumáticos. Posteriormente se especializó en aquellos del tipo Off The Road (OTR), propios de la minería. En 2007, la firma creó la primera fábrica de neumáticos macizos, usando como materia prima los residuos de otras plantas. Vale decir, Morgan condensa toda una historia ligada al mundo de este producto prioritario de la Ley REP.
Esta última experiencia la catapultó definitivamente al mundo del reciclaje de neumáticos, convirtiéndose en una referente dentro del ecosistema. Tal es así, que sus representantes fueron invitados a participar de reuniones con el Ministerio del Medio Ambiente (MMA) cuando se estaban delineando los principios rectores de la Ley REP. Jorge Rodríguez, gerente general de Morgan y Atlas (la empresa que fabrica los neumáticos macizos y valoriza los NFU), participó del llamado Comité Operativo Ampliado para determinar las metas de recolección y valorización de los NFU, así como la definición de roles y responsabilidades de los diversos actores, hasta desembocar en la formulación del Decreto Supremo N° 8.
“Prestamos una solución integral tanto en la Categoría A como en la B. Proveemos los equipos y el personal necesario para ir a los patios de acopio y realizar la manipulación y carga de los neumáticos, hacer el transporte, el pretratamiento y la valorización con la máxima eficiencia y seguridad. Asesoramos permanentemente a los consumidores industriales para que puedan declarar ante la autoridad. También realizamos lo que llamamos ‘devolución circular’, es decir, les entregamos a las comunidades algunos productos para que puedan tener tangibilidad en lo que significa el reciclaje: implementamos plazas con juegos infantiles fabricados con esta materia prima proveniente de la valorización de los NFU”, complementa Jorge Rodríguez.
Como se indicó, Morgan Empresas tiene una vasta experiencia en la industria, mucho antes del surgimiento de los Sistemas de Gestión encargados de la recolección y valorización de los neumáticos. Antes de que existiera el decreto supremo N°8, Morgan ya reciclaba exitosamente los primeros neumáticos mineros gigantes Categoría B de varios de los principales consumidores industriales del país empresas como Anglo American (faena Los Bronces), Antofagasta Minerals (faena Los Pelambres), Codelco (División Andina) y otros contratistas importantes en la industria de la minería; de manera que Morgan es un actor muy importante dentro del ecosistema y un aliado estratégico de los Sistemas de Gestión Colectivos (GRANSIC) y de los consumidores industriales afectos a la ley y encargados de gestionar responsablemente sus residuos.
“Prestamos una solución integral tanto en la Categoría A como en la B. Proveemos los equipos y el personal necesario para ir a los patios de acopio y realizar la manipulación y carga de los neumáticos, hacer el transporte, el pretratamiento y la valorización con la máxima eficiencia y seguridad”.

Las metas de la Ley REP
En Morgan tienen conciencia acerca de la complejidad que supuso la fase de instalación de la Ley REP y que sería difícil cumplir con las metas estipuladas tanto de recolección como de valorización el año 2023 para ambas categorías. En el caso de los NFU Categoría A, las metas de recolección del primer año de vigencia eran del 50%, mientras que las de valorización eran del 25%, ambas respecto de los neumáticos introducidos en el mercado nacional el año inmediatamente anterior (2022). Con respecto a la categoría B, se debía valorizar el 25% de los neumáticos introducidos en 2022. Claramente, las metas no se lograron en 2023.
Sin embargo, a partir de 2024, Jorge Rodríguez percibe un mejor escenario respecto de las metas de la Categoría A, aunque aún no existan métricas oficiales. El gerente general de Morgan Empresas atribuye este éxito parcial a la utilización con mayor frecuencia de todas las herramientas disponibles para poder cumplir con la ley, en particular en la Categoría A.
Según Rodríguez, “gran parte del aumento del porcentaje de cumplimiento de los Sistemas de Gestión Colectivos se debe al trabajo en conjunto con el consumidor industrial”. El representante de Morgan se refiere a lo estipulado en el artículo 23 del decreto N° 8 de metas de recolección y valorización de neumáticos fuera de uso. Ahí se señala que los consumidores industriales tienen dos opciones para gestionar sus neumáticos: entregarlos a un Sistema de Gestión; o valorizarlos por sí mismos o a través de gestores autorizados y registrados.
Si optan por la segunda alternativa, los consumidores industriales pueden celebrar un convenio con un Sistema de Gestión, para que éste informe al Ministerio del Medio Ambiente en su nombre y representación. En ese caso, las toneladas de NFU que haya generado este consumidor industrial, y que hayan sido efectivamente valorizadas, se le imputarán al Sistema de Gestión con el que haya celebrado dicho convenio.
“Para poder valorizar sus residuos, el consumidor industrial tiene varias opciones: le entrega todo al Sistema de Gestión para que lo valorice; o hacerlo directamente con gestores autorizados como nosotros, y ellos lo declaran en el Sistema”, explica Jorge Rodríguez.
El gerente general de Morgan agrega que el acuerdo entre los consumidores industriales y los Sistemas de Gestión de la Categoría A -el consumidor valoriza y el Sistema lo reporta como parte de sus propias metas- ha contribuido a agilizar el proceso. “Así todo el mundo cumple, porque efectivamente los Sistemas de Gestión, al tener que concentrar muchos servicios, se les generan cuellos de botella’ en la recolección y el transporte. Esta herramienta de valorizar residuos y endosarles las metas a los Sistemas de Gestión ha dado muchos resultados para aumentar los porcentajes de cumplimiento”, estima Rodríguez.
El problema, desde la visión de Morgan, es que ese escenario no se replica para la gestión de los NFU Categoría B (los de mayores dimensiones, ocupados fundamentalmente en la minería). Mientras los Sistemas de Gestión Colectivos sólo operan en la Categoría A y están obligados a licitar en el mercado a los gestores que se harán cargo de la recolección y la valorización, en la Categoría B los Sistemas de Gestión Individuales no están obligados a licitar en el mercado. Las grandes marcas de la Categoría B han optado por implementar sus propias plantas de valorización y, por lo tanto, en rigor recurren muy poco a los proveedores disponibles en el ámbito nacional, lo que no colabora con el desarrollo equilibrado del mercado al concentrar esa necesidad. Esto será sumamente relevante ya que las metas de la Categoría B crecerán fuertemente el año 2027, cuando las metas de valorización aumenten desde un 25% a un 75%.

Replicar la herramienta de la Categoría A
Jorge Rodríguez propone una solución para destrabar los “cuellos de botella” que podría producir este aumento exponencial de los porcentajes de valorización en la Categoría B. Lo dice porque, según él, “será un gran desafío logístico, ya que hay que mover miles de camiones, cargar muchos neumáticos, lo que exigirá fuertemente a los Sistemas de Gestión Individuales”.
“Para cumplir las metas, es importante que esta herramienta que ha sido tan bien usada en la A se pueda replicar en la B, porque se va a requerir la ayuda de los consumidores industriales reciclando sus neumáticos. Es decir, que los consumidores industriales valoricen y lo entreguen al Sistema de Gestión. Sin la ayuda de las faenas mineras, difícilmente los Sistemas de Gestión van a cumplir las metas”, se extiende Rodríguez, para quien la recolección de los neumáticos Categoría B es relativamente sencilla porque “sabemos dónde están: en las faenas mineras”.
A su juicio, es muy importante reducir los patios de acopio de neumáticos fuera de uso que se han ido acumulando en la industria minera. Recuerda que a fines de septiembre se produjo un incendio en la minera Lomas Bayas, en la localidad nortina de Sierra Gorda, dejando una estela de humo negro y contaminación. “Hay décadas de acumulación en múltiples patios de acopio y si bien no se pueden valorizar esos NFU de una sola vez, hay que tratar de reducir esos patios para minimizar los riesgos. El tema es que la ley te habla de gestionar porcentajes de neumáticos ingresados el año inmediatamente anterior, y no de lo que hay acumulado”, añade el gerente general de Morgan.
“Como Morgan Empresas nos hemos ido preparando para esta ley, fortaleciendo nuestro servicio, incluyendo más y mejores equipos y fomentando más alianzas con empresas nacionales e internacionales. Hemos desarrollado una solución muy integral para agilizar el servicio que se necesita”, complementa Rodríguez.
“Para cumplir las metas, es importante que esta herramienta que ha sido tan bien usada en la A se pueda replicar en la B, porque se va a requerir la ayuda de los consumidores industriales reciclando sus neumáticos”.

Morgan en el Foro REP
Con miras a su participación en el próximo Foro REP -encuentro organizado por País Circular programado para los días 14, 15 y 16 de octubre en el Hotel Marriott de Las Condes- como representante de Morgan, Jorge Rodríguez la considera un “punto de encuentro muy relevante para compartir con todos los actores y juntos y entender cómo podemos trabajar de una forma más coordinada, porque todo el mundo quiere cumplir con la ley”.







