El decreto de metas para Pilas y Aparatos Eléctricos y Electrónicos desde 3 perspectivas: gobierno, productor y valorizador
En el marco de la implementación de la Ley REP, un hito importante se marcó tras la aprobación por parte del Consejo de Ministros para la Sustentabilidad de la propuesta de decreto para Pilas y Aparatos Eléctricos y Electrónicos (P+AEE), en los que se incluyen también los paneles fotovoltaicos. Para conocer el nuevo reglamento y sus obligaciones, así como los desafíos y oportunidades que abre para la economía circular en Chile, País Circular reunió en un seminario online a los especialistas Paz Maluenda, profesional de la Oficina de Economía Circular del Ministerio del Medio Ambiente; Mitzy Lagos, gerenta de Economía Circular de de Midas Chile; y Víctor Hugo Moncada, director de Calidad y Servicio de Hisense Gorenje Chile.
Hace solo 10 días el Consejo de Ministros para la Sustentabilidad y el Cambio Climático aprobó la propuesta de decreto que fija las metas de recolección y valorización para Pilas (P) y Aparatos Eléctricos y Electrónicos (AEE), dos productos prioritarios de la Ley REP que son particularmente heterogéneos y complejos de tratar. Este hito, luego de 4 años de tramitación del documento, es un esperado e importante avance en el marco de la implementación de la Ley 20.920, que establece marco para la gestión de residuos, la Responsabilidad Extendida del Productor, y fomento al Reciclaje.
De los seis productos prioritarios que define la legislación, los decretos para Neumáticos Fuera de Uso (NFU), Envases y Embalajes (EyE) y Aceites Lubricantes Usados (ALU) ya están vigentes, mientras que el de Baterías se encuentra en elaboración.
Y en el caso de las Pilas y Aparatos Eléctricos y Electrónicos (P+AEE), el siguiente paso será ingresar el decreto para la toma de razón en la Contraloría General de la República y posterior firma del Presidente. Entonces, una vez que se publique en el Diario Oficial, el decreto entrará en vigencia, pero deberán transcurrir 24 meses para que las metas y obligaciones asociadas entren en vigor.
Para preparar el camino y abordar distintas aristas de lo que establece esta normativa, País Circular organizó el seminario web “Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos: Claves del nuevo reglamento REP”. En el encuentro, que fue moderado por el ex Ministro del Medio Ambiente Pablo Badenier, participaron Paz Maluenda, profesional de la Oficina de Economía Circular del Ministerio del Medio Ambiente; Mitzy Lagos, gerenta de Economía Circular de Midas Chile; y Víctor Hugo Moncada, Director de Calidad y Servicio de Hisense Gorenje Chile.

Detalles del decreto para P+AEE
Los productores regulados por este decreto son todos aquellos que enajenan un producto por primera vez en el mercado nacional, o bien, lo importan para su propio uso profesional. En este caso, los productores son principalmente importadores. Pero quedan exceptuadas todas las microempresas, así como quienes importen P+AEE para su uso personal, no destinado a ser comercializados.
Paz Maluenda, profesional de la Oficina de Economía Circular del Ministerio del Medio Ambiente (MMA) e ingeniera en Recursos Naturales Renovables de la Universidad de Chile, afirmó que “se habla de un universo que alcanza alrededor de los 17.000 productores, en el caso de Aparatos Electrónicos y Electrónicos; y de unos 3.500 productores, en el caso de Pilas. En total, unas 20.500 empresas van a estar reguladas, aproximadamente”.
“Este decreto regula todo tipo de Aparatos Eléctricos y Electrónicos, y Pilas de menos de 5 kilos. Porque las de más de 5 kilos van a estar reguladas por el decreto de Baterías, que está en elaboración. Entonces, aborda todos los AEE, salvo algunas excepciones que se pueden ver en detalle en el artículo 3 de este decreto”, explicó la integrante del MMA.
Para mayor entendimiento de estos productos, el decreto establece dos grupos. Por un lado las Pilas, que no se subdividen. Y, por otro, los Aparatos Eléctricos y Electrónicos que se dividen en 3 categorías: Aparatos de Intercambio de Temperatura (AIT), Paneles Fotovoltaicos (PFV) y otros Aparatos Electrónicos y Electrónicos.
En tanto, con respecto a las metas, se entiende el mismo porcentaje para metas de recolección y valorización, mientras que su cumplimiento se acreditará al momento en que los residuos entren a la planta de valorización. Según señaló Paz Maluenda en su exposición, el decreto establece tanto metas generales (para AEE) como específicas (para AIT y PFV), que los productores deberán alcanzar de forma progresiva. “Algunos van a tener que cumplir solo la meta general; otros, alguna meta específica; y otros, ambas”.

“Se habla de un universo que alcanza alrededor de los 17.000 productores, en el caso de Aparatos Electrónicos y Electrónicos; y de unos 3.500 productores en el caso de Pilas. En total, unas 20.500 empresas van a estar reguladas, aproximadamente”.
Metas de recolección y valorización + Mecanismos de recolección
“La meta general la van a tener que cumplir todos los productores de Pilas y Aparatos Eléctricos y Electrónicos, excepto paneles, que se tratan de una forma diferenciada. El cálculo de esta meta se hará en base al promedio de todos los P+AEE puestos en el mercado los tres años anteriores. Y aquí hay una excepción a la excepción, ya que esta meta solamente podrá incluir aquellos paneles que hayan sido recolectados a través de los mecanismos de recolección que están establecidos en este decreto”, indicó Paz Maluenda. Asimimo, comentó que los procesos de valorización aceptados para cumplir con esta meta general, son el reciclaje material y la preparación para la reutilización.
“Respecto a la meta específica, tendrán que cumplirla los productores de Aparatos de Intercambio de Temperatura, porque el objetivo es fomentar el correcto manejo de estos aparatos, ya que contienen gases refrigerantes. El cálculo se hará en base al promedio de los tres años anteriores de los AIT que hayan sido introducidos. Pero los productores de AIT deben cumplir con ambas metas, general y específica. Sin embargo, lo que cumplan de la meta específica, va a poder ser contabilizado para su meta general”, detalló la profesional de la Oficina de Economía Circular del MMA. En este caso, se aceptan los mismos procesos de valorización, es decir, reciclaje material y preparación para la reutilización.
En tanto, los productores de Paneles Fotovoltaicos solo deberán cumplir la meta específica, que se calcula a través de una fórmula distinta y que es más ambiciosa. Para cumplir con esta meta, los procesos aceptados de valorización son todos los que establece la ley: reciclaje material, preparación para la reutilización y valorización energética. “Porque cuando levantamos toda la información de qué estaba ocurriendo hoy día con los paneles, vimos que la industria todavía está súper incipiente y no la quisimos limitar en estas instancias”, indicó la ingeniera en Recursos Naturales Renovables.
“La idea es poder ver, en el transcurso de los años, cuáles son las tendencias de valorización y en una eventual actualización del decreto, quizás los vamos a poder acotar”, agregó Maluenda, quien resaltó que los PFV no solo tienen una larga vida útil, de 25 a 30 años, sino también una gran variabilidad en términos de la internación en el mercado.
Para Pilas y Aparatos Eléctricos y Electrónicos, la recolección parte con una meta del 3% en el primer año, aumentando gradualmente hasta llegar a un 45% en el décimo año. Mientras que las metas específicas para AIT y PFV parten al tercer año en 6% y 10% respectivamente.
Por otra parte, en cuanto a mecanismos de recolección, el decreto establece tres que deberán ser implementados por los Sistemas de Gestión Colectivos de más de 20 productores (GRANSIC) y por algunos comercializadores de P+AEE: Instalación de Recolección y Almacenamiento (IRAs), Recolección domiciliaria (puerta a puerta) y Recolección por parte de comercializadores de P+AEE.
“En el primer año, todas aquellas comunas con una población superior a 500.000 habitantes van a tener que contar con una IRA. El segundo año, todas aquellas comunas con una población superior a 250.000 habitantes. Al tercer año, todas las capitales regionales. Y a contar del cuarto año, todas aquellas comunas con una población superior a los 150.000 habitantes. Estas IRAs, más conocidas como puntos verdes o puntos limpios, tendrán que estar habilitadas para recibir residuos de todas las categorías de Pilas y de Aparatos Electrónicos y Electrónicos, sin importar su composición ni su antigüedad”, explicó la panelista.
“En cuanto a la recolección puerta a puerta, los GRANSIC van a tener que realizar campañas de recolección domiciliaria al menos dos veces al año; abarcando el primer año, al menos un 10% de las viviendas del país; el segundo año, un 30% de viviendas; el tercer año, un 50%; y a contar del quinto año, ya un 80% de las viviendas van a tener que ser abarcadas por estas campañas de recolección. Al igual que las IRAs, estas campañas deben permitir a los consumidores entregar residuos de Pilas y AEE de cualquier categoría, sin importar su composición ni su antigüedad”, afirmó Paz Maluenda.
“Y en el tercer mecanismo, los comercializadores de P+AEE con áreas de venta de más de 400 metros cuadrados, tendrán que instalar puntos de recolección, siempre en convenio a través de un GRANSIC, para recolectar las mismas categoría que ellos comercialicen. Y los GRANSIC, que van a financiar ese punto de recolección, tendrán la obligación de ir retirando los residuos recolectados por los comercializadores”.
Para terminar su exposición, la profesional de la Oficina de Economía Circular del Ministerio del Medio Ambiente pidió paciencia ante posibles temas confusos o dudas de interpretación: “Toda regulación, toda política pública va a dejar ciertas áreas grises. Y en ese sentido, los invito a esperar a que tengamos el decreto ya publicado, la versión final. Acá nos estamos adelantando, porque efectivamente se lanzó esta propuesta y estamos dando la señal, pero hay muchas mejoras que todavía podemos incorporar”.

“Creo que falta una guía que permita interpretar cuáles aparatos van a estar afectos y cuáles van a quedar excluidos de la normativa. Y por otro lado, aclarar el alcance de los procesos de manejo que van a tener o van a poder hacer los recicladores de base”.
Puntos clave desde la mirada del valorizador
Mitzy Lagos, gerenta de Economía Circular de Midas Chile e ingeniera ambiental de la Universidad de Santiago, subrayó los aspectos positivos de este anuncio, pero también los desafíos que supone avanzar de cara a la entrada en vigencia del decreto para Pilas y Aparatos Eléctricos y Electrónicos.
“Uno de los puntos que nosotros más celebramos es que se incorporan los paneles solares, ya que como país resultaba muy necesario. Hoy somos líderes en este tipo de energía, por lo tanto, también tenemos que ser líderes en reciclaje. Segundo, recalco la mantención (en relación al anteproyecto) de las metas desafiantes, pero graduales. Y tercero, me parece igualmente destacable la simplificación en tres categorías, porque antes era mucha información”, declaró la ejecutiva de Midas Chile, uno de las principales plantas de valorización de Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos.
Sobre otros aspectos, Mitzy Lagos reparó en la necesidad de esclarecer aún más ciertos conceptos, por ejemplo, en lo que concierne al consumidor industrial. “Pero también creo que falta una guía que permita interpretar cuáles aparatos van a estar afectos y cuáles van a quedar excluidos de la normativa. Por otro lado, aclarar el alcance de los procesos de manejo que van a tener o van a poder hacer los recicladores de base. Porque algunos AEE son peligrosos; no cuando uno los ve funcionando, sino que cuando se intervienen, sobre todo los de intercambio de temperatura por los gases. Entonces, ahí aclarar bien cuál va a ser el rol de los recicladores de base para que la actividad que ellos hagan también sea segura”.
“Ahora, si bien se simplificaron las categorías, no me queda tan claro cuál va a ser la motivación para el reciclaje y la valorización real de las pilas. Hoy día las pilas no se están reciclando, se mandan a disposición final. Y acá vamos a tener que cumplir una meta, pero como es una meta conjunta con todos los otros Aparatos Eléctricos y Electrónicos, puede ser que no se recolecte tanta pila y sí lo demás”, planteó la ingeniera ambiental.
A la espera de que se organicen los Sistemas de Gestión para que financien esta red, Mitzy Lagos señaló que lo que toca ahora es ocuparse más que preocuparse. “Como Midas, durante nuestros 22 años de experiencia en el mercado, nos hemos preparado para cuando los productores pasen el desafío de conformarse en un Sistema de Gestión. Porque los gestores se tienen que organizar para administrar, pero somos los valorizadores los que vamos a tener que reciclar. Y para eso ya tenemos vasta experiencia en recolección a nivel nacional; recolección puerta a puerta; sistemas de segregación y clasificación para los Aparatos Eléctricos y Electrónicos; educación ambiental; minería urbana para transformar residuos en nuevas materias primas; y en comercio internacional de materiales reciclados, porque lamentablemente el mercado nacional no es capaz de absorber las materias primas que recicla”.
En otra arista, la gerenta de Economía Circular de Midas Chile ahondó en en el desafío respecto a la capacidad instalada en el país para valorizar. “En las primeras etapas del decreto, no veo mucho espacio para plantas valorizadoras en regiones. Pero sí para el fortalecimiento de una red de recolección y pretratamiento, para poder hacer una minimización de volumen y hacer más eficiente el transporte”.
“En nuestra planta hoy día tenemos capacidad a un turno de trabajo, de más o menos 8.000 toneladas al año. Si nosotros vemos que incrementa el volumen de Aparatos Eléctricos y Electrónicos, perfectamente podemos instalar dos turnos y hasta tres. Por eso, yo no veo como una preocupación el tema de la capacidad de valorización de RAEE (Residuos de AEE)”.
“Sí un desafío, como en todo en Chile, es la geografía. Y el desafío también son los permisos para transportar los Aparatos Eléctricos y Electrónicos, porque a veces hay una delgada línea que separa si son peligrosos o no peligrosos. Y la autoridad sanitaria, que es la que nos da esas autorizaciones, a veces pone más o menos trabas al respecto, lo que va a pasar también con las instalaciones de pretratamiento regionales o comunales”.
En tanto, frente al rol de los municipios, Mitzy Lagos expresó que “son muy relevantes, porque ellos tienen que facilitarnos los espacios públicos para hacer nuestras campañas de recolección masiva. Como Midas trabajamos con muchos municipios, tanto en Santiago como en regiones, en comunas rurales también, y hay voluntad. Ya hay un camino trazado, así que ahora solo hay que potenciarlo a través de estos acuerdos público-privados de los Sistemas de Gestión”.
Así, la ingeniera ambiental recalcó que “el desafío que hemos tomado, desde hace años, es fortalecer los procesos para poder reciclar en Chile en forma correcta y sostenible, y que ningún residuo quede, por así decirlo, en lista de espera”.
“Porque esta ley, más allá de Ley REP, se llama Ley de Fomento al Reciclaje. Entonces, no debemos quedarnos solo en la responsabilidad extendida del productor. También debemos ir un poco más aguas arriba y pensar en cómo vamos a abordar desafíos de reparabilidad. Cómo fortalecer los servicios técnicos para alargar la vida útil de los productos. Nosotros queremos que ojalá se recicle solo lo que no se pudo reparar y ahí creo que los productores tienen también un desafío importante”, sugirió Mitzy Lagos al cierre de su exposición.

“Es muy importante implementar un programa de incentivos para quienes tienen cumplimiento de acuerdo con la ley. Pero también incentivar el incremento de Sistemas Colectivos de Gestión, de modo que exista más competencia, más eficiencia y a la vez ayude a la reducción de costos”.
La visión de los productores regulados
Víctor Hugo Moncada, director del Área de Calidad y Servicios de la multinacional tecnológica Hisense Gorenje Chile e ingeniero industrial, recalcó en su intervención la necesidad de generar incentivos y fomentar la educación a la población respecto a esta normativa.
“Desde que iniciamos nuestra operación en Chile en el 2019, nos hemos preocupado de que los productos que reemplazamos a clientes finales, principalmente en los periodos de garantía, que terminan en un proceso de inutilización, por así decirlo, vayan a un proceso de reciclaje. Hoy trabajamos con Midas que, efectivamente, es una de las empresas que está mejor preparada en este sentido”, afirmó el ejecutivo.
“Como nuevo desafío, vemos que es muy importante implementar un programa de incentivos para quienes tienen cumplimiento de acuerdo con la ley. Desde la autoridad, con nuestra colaboración evidentemente, como productores y como llegamos al cliente final, lo podemos hacer. Pero también incentivar el incremento de Sistemas Colectivos de Gestión, de modo que exista más competencia, más eficiencia y a la vez ayude a la reducción de costos. En el fondo, hay que buscar mecanismos, porque hoy efectivamente para los productores esto es un costo. Y créanme que no es un costo menor, es un costo alto”, reconoció Víctor Hugo Moncada, quien volvió sobre los sistemas de incentivos.
“Creo que es muy relevante fomentar y educar a la población en este aspecto. En los países de la Unión Europea, principalmente en los países nórdicos, las personas dejan una botella plástica en algún lugar y el sistema les entrega un euro o un cupón para comprar , por ejemplo. O sea, hay sistemas de incentivo y de educación que a la población le ayudan a que esto avance”, reflexionó el director del Área de Calidad y Servicios de Hisense Gorenje Chile.
“O hay países en los cuales les dicen: ‘Cuando usted deseche este producto, llámenos a este número y nosotros lo vamos a buscar”, por ejemplo. Hay mecanismos que ayudan a que el consumidor entienda que el refrigerador no lo puede tirar al canal, porque después ese canal, cuando llueve, taponea el paso del agua y genera un tremendo conflicto. Y eso ha pasado. Entonces, es algo que tenemos que ir trabajando en conjunto con la autoridad, para que el consumidor al final se encuentre informado”, recalcó Víctor Hugo.
“Ahora, en la medida que todos empecemos a trabajar en esta actividad y tengamos un mayor compromiso, esto se va a ir ordenando. Y lo primero que debemos hacer, todas las grandes, pequeñas y medianas empresas, es sintonizarnos con que, de aquí al año 2045, se espera ya tengamos un porcentaje sobre el 60% de productos que finalmente no terminan como desechos. En China, por ejemplo, Hisense tiene tres plantas de reciclaje gigantes, porque nada se bota a la basura. La idea es que tengamos mucho más reciclaje que residuos que se van a eliminar”, apuntó el ingeniero industrial.
Finalmente, en cuanto a la heterogeneidad de este producto prioritario, Moncada destacó también el papel relevante que los municipios jugarán en este proceso: “El rol de las municipalidades lo considero clave. En particular, para darle la oportunidad a las personas de que los productos no los tiren en cualquier lugar, sino que los vayan a dejar a puntos limpios. Pero lugares donde la gente realmente pueda dejar los artículos. Y eso publicitarlo, informarlo y de ahí comenzar a trabajar para que estos puntos limpios tengan el efecto que uno espera”.
“Porque de repente pasa que hay lugares donde, para ir a un punto limpio, la persona tiene que recorrer 10 kilómetros y no tiene cómo llevar un refrigerador. Entonces, ahí entran también los recicladores de base. E insisto, si lo vemos desde el punto de vista municipal y desde el punto de vista de la comunidad, incluso partiendo por los barrios, esto va tomando fuerza y al final todos saben qué hacer”, sentenció el especialista de Hisense Gorenje Chile.
El seminario completo se puede ver acá:







