Hace más de una década que Franklin Zepeda comenzó a barajar las opciones para hacer frente a los residuos textiles. Así fue como partió con Ecofibra (posteriormente, Ecofiber), un emprendimiento que se hizo muy conocido por producir paneles de aislación térmica para la construcción. Sin embargo, los volúmenes de reciclaje cada vez mayores provocaron que la empresa siguiera creciendo y se transformara hoy en Procitex.

En julio pasado, Procitex inauguró una planta de valorización textil única en Chile, con una capacidad para procesar 100 toneladas mensuales en su etapa inicial. De esta forma, la empresa se ha propuesto la creación de nuevos productos, como el que recientemente presentó en Exponor y que está relacionado con la eficiencia hídrica.

Se trata del retenedor de agua Aquadesk, una placa compuesta por residuos textiles, en su mayoría algodón, junto a fibras sintéticas como el poliéster, el nylon o el polipropileno. Estas últimas son telas que se caracterizan por tener propiedades hidrófugas, por lo que evitan que el agua se filtre en plantaciones.

“Cuando uno riega con una manguera una planta, las investigaciones apuntan a que hasta un 70% del agua no es aprovecha por la planta, debido al drenaje y la evaporación. Cuando usas Aquadesk, instalándolo debajo de la vegetación de la planta, retienes la humedad y ahorras hasta un 80% del uso de agua. Además, permite que los nutrientes o el sustrato que le sumes a tus plantas no se pierda, porque con el agua estos componentes también se drenan”, explica Zepeda.

Pilotos

Considerando la crisis hídrica que ha afectado a Chile en las últimas décadas, que es mucho más intensa en el norte, Procitex comenzó una serie de pilotos para optimizar el uso de este nuevo producto.

“Tenemos varios proyectos en el norte, en Pica y en el Valle de Azapa, en Arica. Además, estamos trabajando con INACAP para desarrollar unos sensores que se incorporan en las placas, que nos permiten monitorear la humedad, la temperatura, el pH y la dureza del agua”, detalla el CEO de Procitex.

En Santiago, realizaron diferentes pruebas en el club de golf Prince of Wales, donde se puede apreciar la diferencia del pasto con Aquadesk instalado. De acuerdo a Franklin Zepeda, “el pasto en los sectores sin las placas se comienza a secar en comparación a los que tienen nuestro producto. Esto es revelador porque vas a usar menos agua y tendrás el pasto igual o más verde que regándolo todos los días. Por eso también lo vemos como una solución para municipalidades que tienen proyectos de ahorro de agua”.

Microplásticos

Una preocupación que ha aumentado en los últimos años es la presencia de microplásticos en el medioambiente. Consultado sobre este tema, debido a que las placas de Aquadesk tienen entre sus componentes fibras sintéticas, Zepeda responde que cerca de un 80% del producto está compuesto por algodón y posee la certificación europea para geotextiles.

“Si bien esta tecnología no se veía en Chile, sí se ha probado en Europa. Nosotros estamos trabajando con la empresa checa Retex, que lleva 80 años en el mercado con todas las certificaciones correspondientes para cada uno de sus productos. Allá se usan mucho para los techos verdes, pero lo novedoso de usarlos acá en Chile viene de mano con la agricultura. En Europa llueve mucho, así que no tienen los problemas que tenemos acá por la escasez, por eso implementar estas placas enfocándonos en la agricultura puede ser clave para las ciudades que tienen crisis hídricas”, precisa Zepeda.

Aquadesk viene en planchas de 1,20 metros por 1 metro, pero son sencillas de dimensionar con un cortacartón, por lo que también se pueden usar en maceteros del hogar. “En Exponor llamó mucho la atención, y más que interesarse como empresas, las personas se acercaban a preguntar para sus casas. La gracia de este producto es que se puede usar tanto para grandes extensiones como para un macetero pequeño”, cierra el CEO de Procitex.